Con la receta de hoy vamos a preparar un rico bizcocho casero muy sencillo de elaborar. En muy poco tiempo podemos tener listo un delicioso bizcocho con margarina Tulipán ideal para toda la familia, y en cuya preparación pueden ayudarnos los más pequeños de la casa.
Este bizcocho resulta muy esponjoso y deliciso, por lo que es perfecto tanto para el desayuno como la merienda. Gracias a la margarina Tulipán conseguiremos un bocado dulce muy nutritivo al que es imposible resistirse, ¿hay algo mejor que un buen bizcocho casero recién hecho?
Ingredientes para 1 bizcocho
- 150 g de azúcar, 150 g de margarina Tulipán, 3 huevos, 60 g de harina de trigo, 60 g de harina fina de maíz Maizena, 1 cucharadita de levadura Potax.
Cómo hacer el bizcocho con margarina Tulipán
Comenzamos precalentando el horno a 180ºC y preparando el molde. Para ello, lo engrasamos con un poco de margarina Tulipán y lo enharinamos ligeramente, dando pequeños golpes boca abajo para que caiga el exceso de harina.
Colocamos 100 g de azúcar en un cuenco con la margarina Tulipán y lo batimos hasta que quede una crema blanquecina. Separamos las yemas de las claras de los huevos, y echamos las yemas a la mezcla. Batimos un poco más hasta que esté homogéneo. Tamizamos encima las harinas con la levadura y mezclamos bien.
Aparte, batimos las claras de huevo junto con los 50 g de azúcar restante, hasta alcanzar el punto de nieve. Las añadimos a la primera mezcla, mezclando suavemente con movimientos envolventes de arriba abajo, para no perder la consistencia.
Echamos la masa preparada en el molde y lo introducimos en el horno. Horneamos el bizcocho durante unos 45 minutos, hasta que haya crecido y esté dorado. Procuraremos no abrir la puerta del horno hasta que hayan pasado al menos 30 minutos, para que no se baje. Esperamos unos minutos fuera del horno, lo desmoldamos y dejamos que se enfríe completamente sobre una rejilla antes de servir.
Tiempo de elaboración | 1 hora Dificultad | Fácil
Degustación
Este bizcocho con margarina Tulipán resulta delicioso a cualquier hora del día, especialmente en el desayuno o la merienda. Lo podemos servir con un buen vaso de leche, té o café, y acompañarlo de fruta fresca o nuestra mermelada favorita. Así tendremos un desayuno muy completo y nutritivo de lo más irresistible.
