Es inevitable en las fiestas de fin de año incorporar a nuestra dieta habitual alimentos de inferior calidad nutricional o más concentrados en calorías. Es por eso que, si bien la calidad puede resentirse (sobre todo en las comidas eventuales) te mostramos cómo controlar las porciones de alimentos dejando para ello, los mejores consejos que puedes poner en práctica.
Calidad y cantidad importan
Cuidar la calidad de lo que comemos puede ser de gran ayuda para proteger la salud del organismo, pero también para asegurarnos una adecuada ingesta de alimentos en cuanto a cantidades.
Esto es debido a que el consumo de alimentos ricos en fibra, con proteínas magras o que demandan masticación y poseen un alto contenido acuoso, pueden contribuir a saciarnos fácilmente y a ingerir una menor cantidad de calorías en cada comida, ajustando de esta forma las cantidades a las necesidades del organismo.
Sin embargo, como hemos dicho, en Nochebuena así como también en Nochevieja y en otras cenas eventuales propias de los cierres de años, es habitual encontrarnos con platos de calidad inferior a los que solemos comer día a día y al mismo tiempo con más calorías, especialmente por la incorporación de dulces o menús más completos que los que solemos elaborar a diario.
Por esta razón, te proponemos además de cuidar la calidad en las cenas navideñas, controlar las porciones de alimentos a ingerir y para ellos dejamos los siguientes consejos que puedes poner en práctica:
Registra siempre lo bebido y consumido
Comer a conciencia y no perder el registro de la cantidad que vamos consumiendo así como también, de los platos y bebidas que escogemos para ingresar a nuestro cuerpo, resulta clave para controlar porciones.
Si estamos picoteando y perdemos noción de la cantidad de bocaditos que hemos ingresado a nuestro cuerpo durante el aperitivo, es muy probable que terminemos consumiendo más de la cuenta; mientras que si estamos atentos a las cantidades que bebemos y consumimos podemos moderar mucho más fácilmente las porciones.
Por esta razón, aconsejamos siempre llevar un registro mental de lo consumido y bebido en las cenas de fin de año.
Come sólo tras haberte sentado a la mesa
Comer de pie y sin sentarnos a la mesa puede conducirnos a un exceso en las cantidades consumidas, ya que promueve un subregistro de lo ingerido.
Por lo tanto, siempre que sea posible recomendamos comenzar a consumir alimentos sólo tras haberlos sentado a la mesa y habernos servido los alimentos.
Evita las distracciones al momento de comer
Comer con distracciones, esto es con música, frente a un televisor o realizando otra tarea como por ejemplo cocinando, bailando u otras, favorece un consumo inconsciente de alimentos y por esta razón promueve la ingesta de cantidades superiores.
Entonces, evitar las distracciones al momento de comer de manera tal de estar atentos a las cantidades y alimentos que consumimos, puede no sólo permitir un mayor disfrute de las preparaciones degustadas sino también, un mejor control de las porciones a consumir.
Come despacio y mastica bien cada bocado
Comer lentamente, saboreando cada bocado que ingresamos al cuerpo y sobre todo masticando bien, puede propiciar la saciedad y de esta forma ayudarnos a controlar porciones de alimentos y cantidades.
Una ingesta acelerada por el contrario, suele propiciar excesos, mientras que el comer despacio se favorecerá el disfrute y al mismo tiempo, una adecuada digestión que nos ayudará a evitar empachos e indigestiones y otras molestias, propias de los excesos de las cenas navideñas.
Utiliza cubiertos siempre que sea posible
La ingesta de alimentos con el uso de utensilios puede favorecer un consumo más lento de alimentos y por esta razón, ayudarnos a controlar porciones.
Por eso, siempre que sea posible aconsejamos utilizar cuchillo, tenedor u otros utensilios como por ejemplo, palillos chinos al momento de comer.
Prioriza en tu plato las verduras
Como hemos dicho en los inicios del artículo, la calidad de lo que comemos puede favorecer mucho el control de las cantidades a consumir. Por eso, recomendamos priorizar en nuestros platos la presencia de verduras o vegetales en general, especialmente frescos.
Estos alimentos son de baja densidad calórica y muy saciantes debido a su riqueza en agua y en fibra, pudiendo por ello ser de ayuda para controlar la cantidad a consumir.
Utiliza platos pequeños y copas o vasos finos y largos
Los seres humanos tenemos múltiples factores que inciden en nuestro proceso de saciedad, tal es así que tendemos a saciarnos si vemos todo un plato lleno de comida; y lo mismo ocurre con las bebidas en sus respectivos recipientes.
Por eso, si utilizamos platos más pequeños veremos cantidades abundantes de alimentos cuando en realidad son iguales o inferiores a las porciones que serviríamos en un plato playo grande; y lo mismo ocurre con las copas o vasos finos y largos.
Así, la utilización de estos recipientes para servir las comidas y bebidas a ingerir, puede ayudarnos a beber menos y a comer menos cantidad, sin darnos cuenta.
Estos son los mejores consejos para poner en práctica si buscamos controlar las porciones en las cenas navideñas y así prevenir excesos y malestares posteriores.
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