Es un tópico que se repite cada año como otros tantos, pero lo cierto es que muchas personas deciden ponerse a dieta cuando llega el mes de enero. La sensación de borrón y cuenta nueva que trae el Año Nuevo, unida a los excesos alimentarios cometidos durante las fiestas, llevan a que muchos se replanteen su alimentación para perder esos kilos que sobran. Si quieres adelgazar, deberías además tener en cuenta el horario de tus comidas, ya que comer antes de las 15 horas podría ser la clave para el éxito o fracaso de la dieta.
La revista International Journal of Obesity acaba de publicar un estudio según el cual se concluye que quienes comen antes de las 15 horas adelgazan más que aquellos que lo hacen más tarde. El proyecto, dirigido por la catedrática de Fisiología Marta Garaulet, en el que ha trabajado personal de la Universidad de Murcia en colaboración con investigadores de las universidades de Harvard y Tufts (EEUU), demuestra cómo el horario de la comida es tan importante en una dieta como los propios hábitos de alimentación.
El estudio ha consistido en someter a 420 personas al mismo tratamiendo de adelgazamiento, basado en la dieta mediterránea, dividiéndolos en dos grandes grupos según la hora de la comida principal del día. Después de las 20 semanas que ha durado el proceso, el grupo de sujetos que almorzaban más temprano consiguieron perder más peso que aquellos que comían pasadas las 15 horas.
La investigación también ha tenido en cuenta otros factores que pueden influir a la hora de intentar adelgazar, como las horas de sueño, el gasto energético o aspectos hormonales, y curiosamente no se obtuvieron resultados significativos en cuanto al horario de la cena. Tradicionalmente, en España tendemos a retrasar mucho más la hora de la comida respecto a otros países, y quizá ahora con los resultados de este estudio muchos empiecen a replantearse sus costumbres.
Vía | La Verdad Imagen | Lockstockb En Directo al Paladar | Los occidentales no estamos más gordos por ser más vagos En Directo al Paladar | Por tu salud: no dejes que una dieta milagro decida en tu mesa