Igual suena un poco radical lo que acabo de afirmar, pero así me lo confirma mi jefa. Ella eligió y se decantó por un horno de sobremesa antes que por una freidora de aire. Yo tengo air fryer y sé que estas son de gran ayuda para preparar comidas y cenas rápidamente. Sé que ofrecen un amplio abanico de posibilidades en lo que a recetas se refieren.
Pero mi jefa- Raquel para los cercanos y @ladyfintess en redes- no piensa lo mismo: ella prefiere su horno y me ha dado buenísimas razones. Yo tengo freidora de aire, pero admito que escuchar los motivos por los cuales prefiere su horno me han hecho dudar.
En mi casa somos dos, pero se cocina también para varios días. Entonces si vas a cocinar cantidades de comida: o bien te haces con una freidora de aire grande -con lo cual el problema del espacio sigue siendo un problema- o bien utilizas el horno de siempre. Obviamente, un horno, al ser más grande que una freidora de aire va a tardar.
Así empezaba Raquel a contarme sus motivos. Ella practica el Batch Cooking así que tiene sentido que busque rapidez y poder cocinar en abundancia. Y si, al final un horno de sobremesa con convección como el suyo es como una freidora de aire grande, por eso el lógico que no quiera cambiarlo.
Por qué comprar un horno de sobremesa y no una freidora de aire
Ya que no he usado nunca un horno de ese tipo quería saber más y seguimos hablando. Obviamente le pregunté por ese maravilloso horno de sobremesa que le había robado el corazón. Y es el Moulinex Optimo, el cual ahora podemos encontrar rebajado de 179,99 euros a 124,90 euros en Amazon.
Y, la verdad, su precio no dista mucho de los últimos modelos de freidora de aire grandes. Por lo que podemos decir que es hasta barato considerando que tiene 39 litros de capacidad frente a los 10 o 12 que puede llegar a tener una air fryer por el mismo precio.
Como usuaria de la freidora de aire no puedo evitar defender lo que conozco, claro, pero eso no quiere decir que no esté abierta a otras opciones u opiniones. Por eso escuchando lo que me contaba la verdad es que la entendía mejor. Después de todo, al final, lo que todos buscamos es una combinación de eficacia, rapidez y ahorro.
Y está claro que Raquel ha encontrado esa combinación en su horno de sobremesa. Y, aun así, aunque el horno es casi una freidora, no se puede negar que tiene más capacidad. Aunque a parte de las rapidez y el tamaño, también hizo hincapié en la facilidad para programarlo:
En mi caso particular, que yo trabajo en casa, puedo meter la comida, programar una hora determinada y esperar a que el horno la haga. Si la estoy haciendo en el día no supone un problema para mí porque es meter la comida en el horno y ya está.
En esto debo decir que está a la par con la freidora de aire, que también podemos programarla. Pero en el caso del horno de sobremesa -viendo como es el suyo Moulinex- debo admitir que el poder escoger de donde procede el calor es todo un lujo. Las freidoras por lo general calientan más por arriba -aunque el aire circule por toda la cesta- y no podemos escoger el foco de calor.
Lo mismo con el tema de precalentar. Pues para algunas recetas la freidora precisa de precalentamiento, a veces hasta de 10 minutos. Y cuando le pregunté a Raquel por el horno me sorprendí. Ya que al parecer su horno de sobremesa no necesita tanto tiempo:
La verdad es que con tenerlo uno o dos minutos encendido antes de meter los alimentos siempre calienta superbién. Entonces no creo que haya tanta diferencia de consumo entre una entre una cosa y otra. En cuanto al tiempo, las freidoras de aire al ser más pequeñas suelen tardar menos en cocinar los alimentos.
Como bien dice lo bueno del mini horno es que tarda menos que un horno convencional en calentarse. Precalentar una freidora de aire puede llevarnos más de dos minutos. Pero una vez alcanzada la temperatura deseada son rápidas, desde luego, y mucho. Así que hay que ir con cuidado pues no tienen ventanita (como el horno) y nos podemos pasar.
Aun así, sigue la cuestión del tamaño. Pues con la freidora sin aceite podemos vernos obligados a cocinar por tandas a no ser que sea de las más grandes. Lo que se traduce en: más tiempo de uso, más consumo y más espera. Algo que al parecer no pasa con los hornos de sobremesa y así me lo afirma Raquel:
En un horno de sobremesa te cabe más comida y más comida siempre es mejor.
Está claro que a más capacidad más espacio para todo así que podemos hacer desde pastel de verduras hasta un pollo al horno entero. Pero también unas sencillas tostadas. Aunque si hay algo que todos tenemos -o debemos tener- claro es una afirmación muy cierta que me ha hecho al final Raquel. Y que es con la que me quedo:
Si tienes un horno de sobremesa, tienes una freidora de aire grande. Entonces por eso no me importa no tener una freidora de aire.
Ahora te entiendo, Raquel ¿Para qué vas a cambiar tu horno de sobremesa por una freidora de aire? Si al final son lo mismo, sirven para lo mismo, son igualmente eficaces y nos sacan de los mismos apuros. Y no es importante si un electrodoméstico está de moda o no. La verdadera motivación para comprar tanto uno como otro debería estar en el uso que vayamos a darle y nuestras necesidades a la hora de cocinar.
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Fotos | Amazon, Chandlervid85 (Freepik)
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