En mi familia era yo la encargada de preparar risotto cuando nos apetecía algo diferente para variar los deliciosos arroces de mi madre. Ahora que somos dos comensales me cuesta calcular bien las raciones, así que siempre hago de más y termina sobrando una buena cantidad que hay que saber aprovechar. Una buena salida de esas sobras pueden ser estas ricas samosas de risotto picantes a la plancha.
El risotto frío queda con una textura compacta perfecta para usar de relleno en esta especie de mini empanadillas inspiradas en la cocina asiática, aunque podríamos usar otra mezcla de arroz que nos haya sobrado de otro plato, combinado con los ingredientes que más nos gusten. En este caso partimos de un risotto de boniato al que añadimos un poco de salsa picante para darle más sabor y un poco más de gracia.
Picar bien el diente de ajo y la cebolleta, pochar en una cazuela con un chorrito de aceite de oliva y una pizca de sal y añadir el tomate y la harissa. Cocinar a fuego medio hasta que la salsa espese y reduzca. Salpimentar al gusto y dejar enfriar.
Trabajar con una hoja de masa filo o brick cada vez, dejando las demás bien tapadas. Cortar cada una en tres tiras largas y pintar con aceite de oliva. Disponer en un extremo, dejando un espacio en los bordes, una cucharada de risotto. Colocar encima una cucharadita de salsa, un poco de queso de cabra y añadir pimineta. Cerrar envolviendo el relleno desde el extremo inferior, doblando la masa sobre sí misma formando un triángulo.
Continuar con el resto de masa y relleno, sellando bien las samosas pero tratándolas con delicadeza. Calentar un poco de aceite de oliva en una buena plancha o sartén y cocinarlas a fuego medio en varias tandas, sin llenar demasiado el espacio. Girarlas para cocinar por ambos lados hasta que estén doradas al gusto.
Con qué acompañar las samosas de risotto
Las samosas de risotto picantes se pueden compartir entre dos o cuatro personas para una cena sencilla, por ejemplo junto con alguna ensalada, o servir de picoteo en una comida más completa. Podemos hacerlas más pequeñas cortando la masa brick en tiras más estrechas, aunque hay que tener algo de maña para que no se rompan al darles forma. Se pueden preparar con antelación para sólo tener que cocinarlas en el momento, ya que están mejor recién hechas.
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