Quizá lo de poder sentarse junto al fuego en una fría noche de invierno sea algo que muchos solo podemos imaginar, pero al final es en la comida donde está la clave de esa sensación cálida que nos invita a quedarnos en casa. Como bien he aprendido de mi familia suiza, no hay nada como compartir una reconfortante cena al calor del hogar cuando bajan las temperaturas.
Y, como los suizos, lo mejor es aprovechar que ahora anochece tan temprano para adelantar un poco la hora de la cena, porque una buena fondue o raclette no son platos para irse a la cama con el estómago lleno. Pero casi es invierno, las noches son muy largas y frías y el cuerpo pide buenas y sabrosas calorías. Con recetas sencillas, buena compañía, los utensilios adecuados y la chimenea de Netflix, tenemos el plan completo.
Fondue de queso suizo
La fondue suiza tradicional no tiene en realidad mucho misterio. Solo hay que mezclar y fundir la mezcla elegida de quesos con algo de vino blanco y/o licor Kirsch, a veces aromatizando el conjunto con ajo, pimienta, limón o añadiendo un toque de almidón para espesar.
Lo cierto es que en cada casa se le da su toque y hay variantes por todo el país, con nombres distintos que suelen referirse a la región característica: fribourgeoise (de Friburgo, con queso Vacherin), de Wallis (añadiendo queso raclette), de Appenzeller (con queso del mismo nombre, muy especiado), etc. La fondue más clásica se conoce como moitié-moitié, porque lleva mitad de queso Gruyère y mitad de queso Vacherin.
A veces se sustituye el vino por un espumoso, sidra o, en versiones sin alcohol, mosto de manzana. El pan también puede variar, siendo más recomendable el tipo hogaza campesina de miga recia y compacta. Para acompañar, son populares los encurtidos y también patatas pequeñas cocidas, deliciosas también cubiertas de queso.
Receta de fondue de queso cheddar
En esta receta proponemos una variante muy sencilla al alcance de todos usando una mezcla de cheddar con leche, aligerando así la preparación y dándole un sabor diferente. Además de pan, se pueden mojar verduras, frutasc como manzana o pera, o pequeñas patatas nuevas.
- Ingredientes para 4 personas. 1 diente de ajo cortado por la mitad, 275 ml de leche caliente, 325 g de queso cheddar, 1 cucharada rasa de maizena o almidón de maíz, 5 ml de zumo de limón, sal y tomillo seco (opcional).
- Elaboración. Frotamos el interior del recipiente de fondue con la parte de cortada del diente de ajo, añadimos la leche caliente al cuenco y calentamos. Rallamos el queso, lo mezclamos con la harina fina de maíz y lo agregamos a la leche caliente. Removemos sin parar hasta que el calor funda el queso y quede sedoso. Añadimos una cucharadita de zumo de limón, sazonamos si lo consideramos necesario, removemos de nuevo y listo para consumir. Servimos recién hecho, en caliente, espolvoreado con tomillo seco y acompañado de pan, verduras, fruta o lo que más nos guste para mojar.
Más detalles en la receta completa.
Para preparar una fondue en condiciones necesitamos el set completo apropiado, que tampoco es especialmente complicado o voluminoso. Un conjunto de fondue típico está formado por el hornillo, el recipiente llamado caquelon y los pequeños tenedores para mojar.
Hoy en día hay muchos modelos de caquelon con diferentes materiales y diseños. Recomendamos sin embargo los de estilo más tradicional, de cerámica o arcilla. Este bonito modelo de la marca suiza Kuhn Rikon es ideal, tanto por la calidad como por el diseño, de lo más alpino, y con una base que recubre el hornillo con seguridad.
KUHN RIKON 32178 - Fondue (Apta para inducción, 9 Piezas: Cacerola, hornillo, Masa para Quemar y 6 Tenedores), diseño Africano
Otra variante que ofrece muy buenos resultados es el caquelon de hierro fundido esmaltado, mucho mejor que el acero cromado o inoxidable, más apropiado para las fondues de carne. Este modelo de Beka es uno de los mejor valorados en Amazon y sale a buen precio, con su quemador y seis tenedores, marcados además con colores en el mango.
Beka Belledone Fondue de Queso Hierro Fundido 20 cm
Raclette de queso
Otro plato muy reconfortante y perfecto para disfrutar en compañía es la raclette, típico de zonas alpinas y, sobre todo, en el cantón del Valais. Raclette es el nombre del queso con el que se prepara este plato, con alto contenido en grasa y muy fundente, tradicionalmente servido con patatas cocidas, encurtidos -imprescindibles llos pepinillos-, y verduras y hortalizas más frescas, según la temporada.
Hay varias formas de preparar el plato. En los valles de los Alpes se suele cortar una gran rueda de queso por la mitad, dejándola en una fuente de calor; el racleur va raspando la superficie a medida que se van sirviendo las raciones. La fuente de calor puede ser un fuego de madera o, más apropiado en los restaurantes, un asador eléctrico diseñado para este plato.
En los hogares se ha popularizado el raclonette, un dispositivo doméstico portátil formado por pequeñas sartenes individuales que se calientan poco a poco, a gusto del comensal. El resultado no se puede comparar a vivir una verdadera experiencia de raclette alpina, pero es una buena alternativa para compartir en casa, sobre todo porque suelen incluir una plancha encima que da más juego para la cena.
Receta de raclette de lacón con pimentón, patata asada y pepinillos picantes
La ventaja que tienen las pequeñas sartenes de raclonette es el juego que nos dan para improvisar recetas distintas en casa. Podemos simplemente fundir el queso y montarnos nuestro plato combinado a partir de lo que hayamos servido en la mesa, pero también está la opción de cocinar varios ingredientes juntos, como en este caso.
- Ingredientes para 4 personas. 400 g de queso raclette, 6-8 patatas, 200 g de lacón cocido cortado a mano, pepinillos picantes, aceite de oliva virgen extra, pimentón, sal en escamas.
- Elaboración. Precalentamos el horno a 180º C. Lavamos las patatas, las secamos y les damos un corte en cruz en la superficie. Las envolvemos en papel de aluminio y asadmos durante 40-45 minutos, según el tamaño. Cortamos los pepinillos a lo largo sin llegar al final, para poder abrirlos en abanico. Conectamos la raclette y pasamos el lacón por la plancha con unas gotas de aceite de oliva virgen extra. Espolvoreamos con un poco de pimentón y unas escamas de sal. Preparamos un recipiente de raclette con tres trozos de lacón, unas rodajas de patata, y un pepinillo, y cubrimos con una loncha de queso. Ponemos el recipiente en la raclette hasta que el queso se derrita.
Más detalles en la receta completa.
Salvo que vayamos muy justos de espacio, a la hora de invertir en un conjunto de raclette siempre es recomendable elegir un modelo con suficientes mini sartenes para repartir entre los comensales que podamos tener en casa. No siempre hay que usarlas todas a la vez, pero se agradecen en esas ocasiones en las que montamos una cena con amigos o celebramos alguna ocasión especial.
Este modelo de la casa alemana Severin cumple más que de sobra su cometido; solo hay que ponerlo a calentar con cierta antelación -tampoco mucho- para que los estómagos hambrientos no sufran demasiado esperando. La piedra natural superior solo necesita algo de sal gruesa y, cuando ya está caliente, cocina de maravilla verduras, pequeñas carnes o mariscos.
Severin RG 2343 Raclette Partygrill con Piedra Natural, 1.400 W aprox., Incluye 8 Mini-Sartenes
Grill o parrilla
Ya usamos casi indistintamente ambos términos para referirnos a la preparación de alimentos en el típico recipiente de hierro, que normalmente se asocia a barbacoas al aire libre. Pero durante los meses fríos no hay que renunciar a nuestras parrilladas, adaptándonos al menos a las circunstancias -asar unas sardinas en el salón quizá no es buena idea, ni están en buena temporada-.
Los dispositivos eléctricos portátiles nos permiten cocinar verduras, carnes, pescados, tofu, frutas o sándwiches y bocadillos al grill dentro de casa de forma muy sencilla, sin líos de fuegos, brasas o carbón. El resultado no será exactamente el mismo, pero es un plan muy apetecible cuando no se puede estar en la terraza, o si directamente carecemos de ella.
Solo hay que ser poco ambiciosos y no esperar que un chuletón nos salga igual que en una parrilla de fuego; lo mejor es combinar piezas más sencillas como una buena pechuga de pollo, hamburguesas caseras o brochetas, con las verduras que más agradecen la plancha (pimiento, calabacín, tomate, champiñones, cebolla, etc.).
Receta de pollo al grill con salsa de whisky y manzana
La perspectiva de cena pollo a la plancha cambia si partimos de carne de ave de buena calidad -hay que volver a las pollerías de mercado-, la marinamos bien y la cocinamos a la parrilla mientras completamos el menú con una buena guarnición de verduras también al grill. La única dificultad es acordarse de dejar las pechugas marinando el tiempo suficiente.
- Ingredientes para 2 personas. 4 medias pechugas de pollo, 30 ml de salsa de soja, 100 ml de puré de manzana, 1 chalota rallada, 1 cucharadita de jengibre fresco rallado, 1 diente de ajo picado fino, 5 ml de aceite de oliva virgen extra, 30 ml de whisky bourbon, 30 ml de salsa barbacoa, 15 ml de vinagre de manzana o vino blanco, 15 ml de miel, 1 cayena, 50 ml de caldo o agua.
- Elaboración. Introducir las pechugas en una bolsa de cierre hermético. Aplastar un poco con un martillo de carne o un rodillo para ablandarlas. Combinar todos los ingredientes menos el caldo en un cuenco y batir ligeramente. Repartir la salsa en las bolsas, reservando unos 60 ml en otro recipiente. Masajear el pollo para embadurnar bien y dejar en la nevera como mínimo media hora. Descartar la marinada de las bolsas y dejar que el pollo se atempere un poco. Calentar el grill y cocinar el pollo a fuego vivo por ambas caras, hasta dejarlo al punto. Calentar la marinada que hemos guardado con 50 ml de caldo o de agua y un chorrito extra de whisky. Dejar que cueza a fuego lento hasta que espese un poco. Pintar las pechugas con esta salsa y servir.
Más detalles en la receta completa.
El tamaño también es un factor clave a la hora de escoger un grill eléctrico para usar en interiores, además de la potencia. Quedarse cortos de superficie de cocinado siempre es un fastidio, pero tampoco queremos un armatoste enorme que no sabemos dónde guardar cuando no lo usamos. Por eso una buena apuesta son los modelos como este de Jata, con diseño abatible pero que admite tres posiciones diferentes.
Así, podemos usarla totalmente abierta a 180º para aprovechar las dos placas, semicerrada para aproechar el calor superior, o apretando para presionar ciertas piezas de carne, hamburguesas o bocadillos y sándwiches calientes. Además cuenta con placas mixtas y una superficie antiadherente resistente al rayado. Perfecta para cocinar al mismo tiempo carnes o pescados y la guarnición de verduras.
Jata GR266 Grill, 1000 W, 0 Decibeles, Negro
Fotos | Fabola - Unsplash - iStock - Pixabay
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