El término gastronómico “Juego Culinario” o “Play Food” ha sido creado para definir ese tipo de cocina vanguardista donde los alimentos se presentan a través de decostrucciones, paisajismos o performances. Un fenómeno de nuestro tiempo, donde la necesidad básica de alimentarse ya está cubierta y nos podemos permitir jugar con la comida.
Pero realmente jugar con la comida, hemos jugado siempre. Seguro que todos hemos oído a nuestra madre con voz cansina, repetir una y otra vez “Con la comida no se juega…”. ¿Quién no le ha tirado un guisante a su hermano? ¿O salpicado de harina, en un juego un tanto erótico, a su pareja mientras preparaba una pastel? ¿Y cuanto nos hemos reído de los payasos que se tiran tartas de merengue?
Particularmente me encantaría usar esta cuchara para bombardear con un puré de patata a mi adversario en una guerra de comida. Y que bonito sería que los proyectiles que se usasen en cualquier conflicto fuesen tan peligrosos como una bola de pan.
Vía | Old Glutton