Cuando ponemos la mesa y empezamos a colocar todo lo que posiblemente nos hará falta, parece que vayamos a comer siete en lugar de tres, pues cuando hay invitados ya ni te cuento.
Precisamente el abridor de botellas es el utensilio que más ronda por la mesa y siempre se queda en la zona de los más bebedores.
Para que esto no vuelva a ocurrir, cada comensal puede tener en su cubierto un abridor de botellas. Este tenedor abridor no impedirá que puedas abrir tu botella sin necesidad de interrumpir a nadie.
No es un utensilio necesario en nuestra cocina, pero seguramente en más de una casa será bien recibido.