La curiosidad del día viene en forma de cono para protegerse de las salpicaduras del aceite. Esto tan sencillo, en apariencia y porque realmente lo es, a mi me ha recordado a los collares isabelinos que les ponen a los perros después de una intervención en el veterinario. de hecho tienen el mismo funcionamiento y se crean de la misma forma, pero claro está con otra finalidad.
Están fabricados en silicona y se enrollan sobre sí mismos dejando un hueco para introducir el asa del utensilio de cocina. También se pueden utilizar utensilios que llevan dos mangos, como por ejemplo unas pinzas de barbacoa o unos palillos (sí, hay gente que cocina con palillos chinos, de hecho es muy divertido y útil).
En mi caso particular no los usaría mucho. Uno que ya está casi inmunizado a las salpicaduras de aceite caliente. Pero la verdad que lo veo muy bien para quien no se atreve a freír unos huevos por las salpicaduras.
Vía | Yanko desing
En Directo al Paladar | Quemaduras en la cocina
