Constancia, pasión y locura, son tres palabras que resumen la carrera de Álvaro Ávila, el chef de La Alvaroteca. Este joven cocinero, con una ya larga carrera sobre sus hombros, sigue deleitando a los comensales que se acercan a probar su cocina, llena de sabores intensos y un altísimo nivel técnico, que en los últimos años ha pulido muchísimo, para ser una de las mejores ofertas culinarias en la ciudad de Málaga.
Cada uno de sus platos es una receta o guiso en miniatura y cada visita a este restaurante malagueño, te sorprende con nuevos bocados, siempre en tamaño pequeño y siempre complejos y llenos de matices. Los platos que salen de la cocina de Álvaro son divertidos, son sabrosos y están siempre buenos.
Su repertorio es amplísimo y en cada visita a La Alvaroteca, las novedades están garantizadas, sabiendo siempre, eso sí, que será una experiencia gastronómica excelente, llena de detalles pensados por quien sabe cómo conquistar tu paladar.
Dale carta blanca al cocinero, que él sabe cómo hacerte feliz
En lugar de una carta convencional, en la que el cliente mira y elige lo que cree que será lo mejor, en La Alvaroteca lo mejor es ir al menú llamado Carta Blanca, en la que precisamente se trata de eso, de darle la libertad al cocinero, darle carta blanca para que te vaya trayendo lo que él considere mejor.
Así podrás probar sus platos más clásicos, así como los que hoy tenga porque encontró una materia prima excepcional, junto a los que quiere que pruebes porque son nuevos en su carta, de forma que le dejes sorprenderte con su técnica y creatividad.
Los platos que más gustan a sus clientes suelen estar disponibles, pero comer en La Alvaroteca depende de los ingredientes que haya comprado para ese día, que obviamente varían de una visita a otra, por lo que siempre resulta distinto, y siempre sorprende. Además la constante innovación de su cocina, hace que siempre haya nuevas recetas para descubrir.
En el menú de Carta blanca, el personal de sala va llevando a la mesa una sucesión de distintos platos, que seguirán trayendo mientras no avises.
Cuando notas que estás cerca de irte llenando, avisas al camarero para que lo diga en la cocina y así te traerán uno o dos pequeños platos más, -los que ya estaban marchando en la cocina-, y después el postre, si quieres.
A la hora de cobrar, te llegará la nota con todos los platos que has comido y esa cuenta estará en torno a los 35-40 euros más la bebida, ya que los precios de La Alvaroteca no están disparados.
Existe la opción de un maridaje de cinco copas de vino elegidas para armonizar tu menú que se cobra al precio de 35 euros. Así puedes probar vinos, generosos, espumosos o clásicos, pensados para acompañar los distintos platos que irán llegando a tu mesa.
El restaurante y sus espacios
La Alvaroteca tiene dos espacios bien diferenciados. Uno más formal, situado frente a la entrada en dirección a la cocina, elegante y sobrio decorado en madera y con mesas metálicas estilo industrial y otro más alocado, conocido como el manicomio por su decoración más excéntrica y divertida con mesas y paredes llenas de salpicaduras y colorido.
El servicio se hace en vajillas creadas para cada plato, con diseños llenos de referencias al mar. Todos los camareros conocen la cocina de Álvaro Ávila y te explican perfectamente todo lo que lleva cada plato. Su atención es muy cercana, a la vez que discreta, prudente y rápida, lo que hace muy agradable cada visita.
Evolución y refinamiento
Para cocinar y más en formato miniatura, hay que tener una muy buena base como cocinero. En La Alvaroteca, disfrutarás de sus fondos perfectos, salsas bien elaboradas, y conceptos claros hacen que encajen los distintos ingredientes en interesantes combinaciones de sabores, sea cual sea el formato elegido.
Desde que abrió su restaurante, la calidad, las técnicas y los conocimientos del chef han sido evidentes, pero la puesta en escena no siempre fue la de ahora. Su creatividad desmedida y su originalidad, no siempre fueron bien entendidas y su "punto de locura" a veces no compaginaba bien con el concepto de un restaurante gastronómico tal como se entiende hoy.
Por eso, somos muchos los que nos hemos alegrado al ver la evolución y refinamiento de Ávila a los mandos de la Alvaroteca. Su genialidad no está reñida con su humildad y cercanía. El chef ha sabido escuchar y adaptarse a los consejos que con todo cariño le han ido dando compañeros, críticos y amigos, manteniendo su calidad y su concepto.
Así, trabajando con pasión y constancia y manteniendo cierto puntito de locura y originalidad, ha ido refinando sus conceptos, ofreciendo, por fin, una cocina que agrada a todos. Los platos bien pensados, interesantes combinaciones de sabores y un formato moderno de pequeñas tapas que son grandes platos en miniatura, han sido el secreto de su éxito.
Atrás quedan algunas ideas divertidas, que si bien tenían su público, no seguían el camino que el cocinero mantiene en los últimos años. Ahora, brilla su madurez como profesional, que se ha asentado en este formato de tapas gastronómicas que ha calado en su clientela.
Recientemente, Álvaro Ávila ha sido galardonado con el premio Mejor Chef Novel en la VI Edición de los Premios Gastro&Cía lo que ha hecho que el restaurante esté más concurrido desde entonces y haya supuesto para muchos un redescubrimiento de su cocina, cada vez más fina y acertada.
Las dificultades del sector
Nos cuenta Álvaro que en su opinión todos o casi todos los restaurantes de Málaga están pasándolo mal con el tema de encontrar buen personal de sala, aunque el mantiene un buen equipo, pese a contar con las mismas dificultades que tienen casi todos sus compañeros de profesión.
Entre el alquiler mensual, la factura de la electricidad y las nóminas de todo el personal, subir la persiana del local y abrir cada día, tiene un coste enorme. Cuesta mucho cubrir los gastos y hacer viable este negocio.
"Mantener un restaurante abierto, es casi una cuestión de romanticismo. Tienes que estar mu enamorado de tu profesión y tener el gusto de agradar a tus clientes, que, afortunadamente, no nos fallan", nos cuenta.
Qué pedir en La Alvaroteca
Como ya os he contado a lo largo de este reportaje, lo mejor es darle al chef carta blanca para que os prepare lo que considere mejor, pero son muy recomendables algunos de sus platos que destaco a continuación:
El trío de esferificaciones de aceituna, -aloreña, kalamata y aliñá, el royal de liebre, las lentejas con jamón ibérico de Dehesa de los Monteros, sus arroces, el tartar de atún rojo de Almadraba con caviar Oscietra, la patata Toro-brava, la ostra de Normandía con leche de tigre de coco y esferas de maracuyá o la caja sorpresa con su crujiente de arroz negro con anguila entre otros son algunos de mis favoritos, pero podría añadir muchos más. Podéis ver muchos de esos platos en las fotos que ilustran este post.
También conviene dejar algo de espacio para los dulces ya que también en el capítulo de repostería, la cocina de Ávila os va a gustar mucho. Recientemente, también han introducido recetas de cócteles para alargar el menú.
Una buena forma de conocer sus propuestas es seguir su cuenta de Instagram que el cocinero lleva personalmente, en la que nos cuenta a diario sus visitantes mas ilustres y muestra sus platos más valorados.
Datos prácticos
LA ALVAROTECA
Dónde: Calle Gerona, 38 bis, 29006 Málaga.
Precio medio: 40 euros + bebidas
Reservas: 680 62 52 14.
Horarios: De martes a sábados en horarios de almuerzos y cenas.
Cierra Domingos y Lunes
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