El bar de Barcelona donde escabeches y rumba se dan la mano suma 125 años de historia

En el corazón de Barcelona, rodeado por el bullicio del turismo, se encuentra un rincón que ha resistido al paso del tiempo pese a estar rodeado de puestos de poke, sushi, ramen y tacos: un bar modernista que consigue el hito de celebrar su 125 aniversario.

Este emblemático espacio de “platillos, rumba y alegría” no solo es testigo de la historia de la ciudad, sino también un símbolo de la cultura catalana y la tradición de la tapa española.

Se trata del Bar Alegría, situado en el número 133 de Comte Borrell, tiene cada domingo un poco de rumba y jaleíto a partir de las 19 horas, llevando al centro de la ciudad un ambiente muy necesario en medio de un ensanche que a esa hora ya empieza a prepararse para la semana.

Fundado en 1898, este bar ha sido punto de encuentro para generaciones de barceloneses y turistas que buscan vivir una experiencia relacionada con las tapas y con la cocina tradicional que va a cargo de Tomas Abellán, encargado de renovar la esencia de este bar centenario.

Desde sus inicios, se ha destacado por ofrecer no solo este formato, sino también un ambiente muy singular gracias a su decoración modernista, caracterizada por vidrieras, madera tallada y detalles que evocan la Belle Époque de la que tan poco queda en los locales de la ciudad.

A lo largo de los años, este establecimiento, que se define como vermutería, casa de comidas, bar de tapas, bistró y rumba en Barcelona, ha evolucionado resistiéndose a perder su esencia convirtiéndose en un referente del escabeche en Barcelona.

Pocos platos, pero eficaces

Su carta (con muy pocos platos, pero jugando mucho a la eficacia) incluye clásicos como las patatas bravas, croquetas caseras y una selección de embutidos locales.

Su carta de platillos es un hit de clásico, con boquerones marinados, gildas de anchoas del Cantábrico, brandada de bacalao y paté casero de campaña con encurtidos, destacando también platos nostálgicos como El bikini de mi infancia y el Cremoso de chocolate con pan, aceite y sal.

Aunque el bar conserva su diseño original, ha introducido toques contemporáneos en su oferta gastronómica (sin salirse del relato de bar de tapas clásico), apostando por ingredientes de siempre y de la zona, sin incorporar propuestas extravagantes para respetar los sabores auténticos de la región.

Situado a los pies de un edificio emblemático con toques modernistas y ambiente castizo, el local lleva con dignidad su ubicación en el céntrico barrio del Eixample.

Además, este espacio no solo es un lugar para disfrutar de una buena comida, sino también para sumergirse en la historia (y en la música) de Barcelona, así como en su arquitectura.

La impresionante puerta modernista, de bonitos tiradores forjados, y su suelo de baldosa hidráulica le dan al conjunto un aura especial, lejos de ese tipo de bares de franquicia que, lamentablemente, tanto abundan en el centro de las ciudades. Aquí el sabor de lo auténtico se respira a varios niveles.

Bar Alegría

• Dirección: Comte Borrell, 133 (Barcelona)
• Teléfono: 930 326 720
• Precio: 25 €
• Horario: De lunes a domingo, de 13.30 a 16 horas y de 19 a 23 horas.

Foto | @baralegriabarcelona/Instagram

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