Este pueblo cerca de Toledo tiene una de las plazas más singulares y bonitas de España, una joya histórica por descubrir

Ejemplo puro de villa manchega, esta localidad guarda un tesoro arquitectónico único en nuestro país

La ciudad de Toledo acapara tanto la atención que suele eclipsar al resto de una provincia con muchos más rincones que merece la pena descubrir. Ciudades, pueblos y parajes naturales poco conocidos que pueden sorprender a quien se anime a cruzar sus caminos, más aún si se quieren evitar las masificaciones de la capital. A unos 60 kilómetros se encuentra por ejemplo Tembleque, una villa puramente manchega que exhala historia entre sus calles.

Con menos de dos mil habitantes en todo el término municipal, perteneciente al Partido Judicial de Ocaña, Tembleque es una localidad que reproduce la típica estampa de La Mancha que parece anclada en el tiempo, con su arquitectura tradicional, casas encaladas y ese característico color blanco que brilla en todo el pueblo reflejando la luz del sol.

Su historia está directamente vinculada a la propia Toledo, cuando la primitiva villa original se vinculó al territorio carpetano romanizado tras la conquista de Toletum por los romanos. Como tantas localidades de la zona, pasó después por manos visigodas e islámicas, hasta la definitiva Reconquista cristiana, pero conservando esa multiculturalidad que definen su historia.

La Edad Moderna no fue muy generosa con los temblequeños ni tampoco dejó buenos recuerdos el siglo XIX, sufriendo una grave inundación, saqueos e incendios durante la Guerra de la Independencia, que arrasó con muchas viviendas. Ya en el siglo XX la estabilidad paulatina terminó por asentar la villa en torno a la vida agraria, diversificándose con el paso de las décadas la economía gracias a la apertura de fábricas y estimularse, poco a poco, el turismo.

Un turismo que sin duda viene atraído por una de las joyas que guarda casi en secreto esta villa, su magnífica y singular Plaza Mayor.  Comenzada su construcción en el siglo XVI, aunque su cronología exacta aún no está clarificada por los historiadores, es un ejemplo único de plaza barroca popular de nuestro país, concebida para uso y disfrute de sus vecinos con un eminente carácter social, cultural y lúdico.

Tiene planta rectangular pero con un trazado irregular, lo que ya de por sí le otorga un aspecto peculiar. Muestra el estilo de plaza escenográfica, a modo de corrala o corral de comedias, rodeada en tres lados por una galería corrida porticada a tres alturas con columnas toscanas y pilares cuadrangulares en los accesos. Los dos pisos superiores se conservan como corredores con las típicas vigas de madera transversales, fachadas encaladas y cubiertas a dos aguas con tejas. Los antepechos de las barandillas están decorados con la cruz de San Juan y destaca el torreón destinado a las autoridades.

Es por tanto una plaza concebida como un gran escenario para celebrar espectáculos taurinos, exhibiciones ecuestres y otros actos festivos, que hoy alberga en sus soportales pequeños comercios y varios locales de hostelería donde se congregan tanto turistas como vecinos. El Ayuntamiento, del siglo XVII, se alza en uno de sus lados, también barroco.

La plaza, declarada Bien de Interés Cultural en 1973, comunica con la Plaza del Orden a través de un pasadizo, donde se encuentra la iglesia gótica de Nuestra Señora de la Asunción, también digna de visitarse, así como otros templos religiosos que se conservan en la localidad, destacando la bonita ermita de la Vera de la Cruz, con su planta octogonal y cubierta por una bella cúpula.

No lejos de allí se encuentra el Palacio o Casa de las Torres, de estilo barroco y con una magnífica fachada, formada por una estructura alrededor de un patio cuadrado con doble galería, enmarcada por torres o la pintoresca Casa de Postas, típica construcción manchega popular.

Tembleque es además buen punto de partida para explorar la zona siguiendo la Ruta del Quijote a través de sus espacios naturales y pueblos y villas vecinas, un territorio salpicado de molinos de viento, yacimientos arqueológicos y una naturaleza propia que luce más generosa en otoño y primavera.

Imágenes | Ayuntamiento de Tembleque

En DAP | Toledo tiene un primo pequeño poco conocido en un bonito pueblo monumental, una escapada ideal a una hora de Madrid

En DAP | Este pueblo de Toledo a una hora de Madrid esconde un Cañón del Colorado en miniatura

Ver todos los comentarios en https://www.directoalpaladar.com

VER Comentarios

Portada de Directo al Paladar