¿Llegas tarde a viajar este verano y te está amargando el precio de los billetes de avión? No te preocupes, o no demasiado, eres uno más del 55% de españoles que aún no ha comprado sus billetes a pesar de tener intención de irse de vacaciones.
La realidad es que, a medida que el verano se echa encima, el precio de los billetes aumenta porque los aviones se van llenando y, sobre todo, ciertos destinos se vuelven imposibles. El Caribe, países de nuestro entorno y los ya de por sí prohibitivos destinos del Sudeste asiático, en las cifras más altas de la última década, convierten viajar en un lujo casi inasumible.
Aun así, para vuelos de rango corto y medio, hay opciones para ahorrar con los billetes de avión que quieras comprar aunque te esté pillando el toro. Evidentemente, no se trata de soluciones milagro en las que encuentres billetes tirados de precio, pero sí que te pueden ahorrar unos cuantos euros.
Las soluciones también son útiles para otro tipo de transportes como trenes o barcos, pero lo cierto es que es en los aviones donde hay muchas más frecuencias y muchas más opciones para procurar que no salga un poquito más barato nuestro verano.
Especialmente si hacemos grandes viajes o viajamos con niños y tenemos que ahorrar lo posible para que comprar billetes para tres o cuatro personas no nos resulte tan caro. La ventaja es que estos dos trucos son muy elementales y están al alcance de prácticamente cualquier persona. Lo primero que debemos hacer es intentar buscar vuelos en sábado.
Sí, sabemos que es un día que generalmente la gente utiliza para tener un poquito de jaleo y distraerse, pero también es un día donde hay muchos vuelos y en los que la mayoría de las personas (por esos motivos antes citados) rechaza viajar.
En la medida de lo posible, viajar en sábado (si te lo puedes permitir) puede suponerte ahorros de entre un 20% y un 30 % del precio del billete habitual, lo cual no está nada mal si puedes darte ese capricho y entre comillas perder un sábado.
La otra solución, sobre todo ahora que España empieza estar mejor conectada con trenes de larga distancia más asequibles, es pasar por aeropuertos que puedan ser más baratos que nuestro aeropuerto de cabecera.
En España son muchos los aeropuertos que tienen líneas low-cost hacia destinos más o menos vacacionales durante el verano. En ese mismo sentido, ciudades como Barcelona, Madrid, Sevilla y Valencia empiezan a estar bien conectadas con largas distancias baratas que pueden facilitarnos dar el salto a algunos aeropuertos con un billete mucho más barato.
También sucede sin recurrir al tren. Por ejemplo, los vuelos nacionales desde el aeropuerto de Sevilla son más baratos que los vuelos internacionales, donde Málaga o Jerez son más competitivas. En el caso vasco, por ejemplo, puede ser más rentable volar a ciertos destinos europeos desde Bilbao que desde el aeropuerto de San Sebastián.
Lonely Planet Europe (Travel Guide)
Una realidad que también merece la pena descubrir si estamos en Islas Baleares, donde algunos destinos pueden ser más golosos si viajamos desde Mallorca que desde Ibiza —y viceversa— o en el caso de la Comunitat Valenciana, donde hay vuelos más interesantes desde Valencia o desde Alicante en función del destino.
Imágenes | Iberia
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