Aunque la cocina italiana sea una de las más populares del mundo —por no decir la que más—, la realidad cuando la sacamos de su hábitat natural (la vera Italia) y la trasladamos a la alta cocina y al mundo de las estrellas Michelin es más bien áspera.
Son miles los restaurantes italianos que hay en el mundo, pero son pocos —en proporción— los que consiguen una estrella Michelin haciendo cocina italiana de manera internacional.
Por poner un ejemplo en el caso español vemos que la cocina internacional, con excepción de la cocina japonesa, no está muy representada en cuanto a guías. Puede que lo justifiquemos con que no nos hacen falta otros elementos culinarios, pero lo cierto es que ejemplos en la Guía Michelin de cocinas del mundo no abundan.
Se salva esa excepción nipona, con 13 restaurantes con estrella Michelin en España, y luego hay algunos destellos muy puntuales. Es el caso de la cocina colombiana de Edwin Rodríguez en Quimbaya o era el ejemplo de Roberto Ruiz en Punto Mx, que dejó huérfano el escalafón de cocina mexicana hasta el año pasado, cuando COME by Paco Méndez consiguió su primer florón.
Las estrellas Michelin italianas de Alicante
Por resumir en ciertas cuentas, en España hay casi trescientos restaurantes que tienen al menos una estrella Michelin, pero de todos ellos sólo dos hacen cocina italiana. Curiosamente, los dos están en la provincia de Alicante y, curiosamente —o no—, los dos chefs que los comandan saben de sobra lo que es manejar un estrella Michelin.
Hablamos, por un lado, de Casa Bernardi, el proyecto más personal del chef Ferdinando Bernardi, que abrió en Benissa —un pequeño pueblo en la comarca de la Marina Alta— este restaurante con forma de alquería a finales de 2021, pocos meses después de salir de Orobianco, su anterior proyecto.
La ironía o la curiosidad —podemos llamarlo como queramos— está en que la otra estrella Michelin de cocina italiana en Alicante ha caído —de nuevo— en Orobianco (en Calpe, también en la Marina Alta) . Tras la salida de Bernardi, incluidos cruces de declaraciones entre la propiedad y el chef, Orobianco perdió la estrella y cambió de cocinero, entregando las riendas del proyecto a Marco Tacchetto.
Sin embargo, Tacchetto también saldría del restaurante a principios de 2023 cuando la dirección decidió apostar a caballo ganador. Para ello, contrataron como director gastronómico a Paolo Casagrande, tres estrellas Michelin en Lasarte (Barcelona) y uno de los colaboradores más estrechos de Martín Berasategui.
Copia original: Antipasti, pasta, pizzas y un risotto (GASTRONOMIA)
Con mando en plaza para Andrea Drago, que es quien oficialmente ejecuta la cocina de Orobianco, el restaurante de Calpe vuelve a recuperar su brillo Michelin dos años después de perderlo y, de nuevo, demuestra que en la Costa Blanca se habla mucho italiano.
Imágenes | Casa Bernardi / Paolo Casagrande / Orobianco
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