En pleno casco antiguo de Palma de Mallorca, dentro de un bello edificio histórico que ya roza los cinco siglos de vida, se encuentra el hotel Can Bordoy, todo un paraíso para los viajeros que busquen sentirse como una estrella de cine clásico viviendo su propia película de lujos pasados.
Este hotel boutique acaba de revalidar su posición en el sector del alojamiento al recibir un nuevo premio que se suma a los varios reconocimientos de prestigio que ya luce en su palmarés. Reconocido como el mejor hotel all-suite europeo del año por los premios World Travel Awards, Can Bordoy ofrece en una ubicación inmejorable toda una residencia privada a sus huéspedes con 24 suites únicas de diseño donde se cuida hasta el más mínimo detalle.
Huyendo del estilo de otros hoteles de lujo que apuestan más por un diseño contemporáneo, más minimalista o de estilo nórdico con líneas puras y de ambiente más frío, en Can Bordoy se respira ese aire del glamour de épocas pasadas pero actualizado al mundo actual, sin caer en la decadencia kitsch ni el exceso barroco.
El propio edificio del hotel, que perteneció a la familia Bordoy Blanes, es casi un escenario cinematográfico en sí mismo que adentra al visitante a otra época, en pleno centro de Palma pero a la vez aislado del ajetreo urbano de una ciudad tan turística y llena de vida.
El hotel esconde además un jardín privado interior de notables dimensiones para estar en pleno casco urbano, lleno de senderos que se pierden entre la frondosa vegetación y que también llevan a una exclusiva piscina climatizada abierta todo el año. Un jardín que además inspira la cocina del restaurante Botànic, bajo una filosofía de gastronomía orgánica y sostenible con el entorno.
Las 24 habitaciones, todas suites y cada una con un diseño único bajo un mismo hilo conductor, están concebidas bajo la idea de ofrecer una residencia de lujo pero discreta, combinando el diseño aristocrático del siglo XIX con el estilo art decó y la elegancia de escenarios cinematográficos de épocas pasadas.
Como no podía ser menos, el hotel cuenta con spa y servicios privados de wellness, masajes y tratamientos, además de un trato personalizado para sus huéspedes con servicio de mayordomo personal. Una verdadera experiencia de lujo para sentirse como una clásica estrella de cine en blanco y negro, sin renunciar a las comodidades y las tecnologías actuales.
Imágenes | Hotel Can Bordoy
