Hacía mucho tiempo que quería ir a cenar con mi mujer a este restaurante madrileño, elegante, romántico con luz tenue y fama de buenas elaboraciones pero por unas cosas o por otras, lo había ido aplazando. Por suerte, aprovechando el puente, me acerqué a conocer Naia Bistró, un restaurante madrileño que lleva doce años seduciendo con su cocina.
Situado en la madrileña Plaza de la Paja, tiene una ubicación privilegiada, en una zona tranquila y a la vez muy cercana a otros locales y restaurantes, que han convertido el barrio en zona de picoteo, aperitivo, y por supuesto en destino ideal para comidas y cenas de parejas, reuniones de amigos o comidas de negocios.
El local y sus espacios
Una pequeña barra en la entrada con un lugar para tomar algo o esperar, da paso a un comedor enmarcado con espejos y decorado con buen gusto. Es un espacio donde las mesas, están vestidas con austeridad, sin manteles ni exceso de decoración.
Unas velas, una lámpara que aporta luz indirecta y una luz no muy fuerte en el ambiente, crean una atmósfera agradable y relajada. El local es tranquilo e invita a la charla en voz baja, sin necesidad de levantar el tono. Por desgracia, ese tono de luz tan agradable para el comensal no ha hecho fácil la toma de imágenes del ambiente y de los platos.
La carta de Naia Bistró
La oferta de este restaurante se divide en cinco bloques: platos para picar, platos de la huerta, las carnes, del mar y los dulces postres, todos ellos abundantes y bien servidos.
La carta de vinos, muy amplia y con la posibilidad de pedir algunas de las referencias, también por copas, incluye champagne, vinos de las principales Denominaciones de Origen e incluso vinos de Madrid, que cada vez encontramos en más restaurantes de la capital.
Los precios no son muy altos, y más considerando la situación, decoración y estilo del local, por lo que sin privarse ni excederse, se puede salir por pareja con un precio en torno a los 50 a 60 euros, tomando dos entrantes, dos principales y compartiendo un postre.
Nosotros comenzamos con dos cervezas que nos sirvieron con un aperitivo delicioso, un vasito con una crema fría de zanahoria con cítricos y ají amarillo, un toque picante que nos gustó mucho.
Luego llegó la ensalada burrata pugliese, servida sobre una cama de berenjena escalivada, y acompañada de unos dados de berenjena crujiente, hojas de rúcula y nuez rallada, con salsa de tomates secos. Muy recomendable.
El otro entrante que pedimos, fueron las alcachofas con cigalas, servidas con una velouté del caldo de cocción y de los jugos de las cabezas, acompañadas de trocitos de panceta ahumada y espárragos verdes salteados. Otro plato a pedir.
En cuanto a los platos fuertes, probamos el ceviche de corvina, bien elaborado, con un caldo de servicio o leche de tigre potente, compensado con trocitos de calabaza y algunos granos de maíz cancha. La combinación de ingredientes queda equilibrada y al terminarlo deja un regusto ligeramente picante muy agradable.
Llegó el turno de probar el salmón a la llama, uno de los platos emblemáticos de Naia Bistró que se cocina al soplete, se napa con salsa de ostras y se sirve sobre quinoa. El punto de cocción es perfecto y el sabor muy conseguido.
El plato final, el steak tartar, uno de los platos que dio fama a este local, que se realiza como mandan los cánones. Como punto elegante, se sirve con una emulsión de mostaza y un maravilloso helado también de mostaza.
Carne de solomillo de ternera cortada a cuchillo, aliñado con buena mano, al punto que pida el cliente y coronado con un huevito de codorniz con virutas de trufa y acompañado de rebanadas de pan secadas en el horno.
Tras este menú tan agradable, en el que habíamos compartido cada plato pidiendo raciones más pequeñas para poder probar cinco platos, fuimos capaces de pedir un postre que pudiera poner un broche a tan deliciosa cena.
Elegimos el brioche caramelizado, una "torrija" ligera, colocada sobre un brochazo de toffee, acompañada de helado de frutos rojos y mousse de café. Unos petazetas de chocolate dan el toque final a este plato. El café, también de calidad, bien servido y con mucho aroma.
Naia Bistro
Plaza de la Paja num 3
Madrid
Tel reservas 913662783
Precio medio 25-30 euros por persona
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