El pueblo de la Mancha de cuyo nombre no quiso acordarse Cervantes es de los más bonitos de España y está a dos horas de Madrid

Enigmático y poético fue Cervantes con la más célebre frase de la historia de la literatura, aquella con la que da comienzo su Don Quijote de la Mancha o, simplemente, El Quijote. ¿Cuál sería ese "lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme", donde vivía "un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor"? Nunca podremos saberlo y, probablemente, sería solo una invención, pero hay una villa manchega que presume de serlo, y es una escapada perfecta no muy lejos de Madrid.

Apropiarse de ser el pueblo de El Quijote no es una invención de la propia localidad, sino fruto de un estudio realizado por un equipo de investigadores de la Universidad Complutense de Madrid en 2005, con motivo del IV centenario de la publicación. Midiendo las distancias que recorría el hidalgo, considerando los caminos existentes en el siglo XVI, determinaron que dicho pueblo debía estar en el Campo de Montiel.

Una vez trazado el mapa inicial, se seleccionaron 27 villas posibles y, tras cruzar diversas variables, la cosa quedó reducida a tres finalistas: Fuenallana, Alcubillas y Villanueva de los Infantes. Y, finalmente, tras analizar todas las pistas y menciones al lugar plasmadas en la novela, los expertos coincidieron en que solo este último reunía todos los requisitos.

Villanueva de los Infantes, de los pueblos más bonitos de España

Municipio y localidad del mismo nombre, Villanueva de los Infantes se encuentra en el centro del Campo de Montiel, en el sureste de Ciudad Real, y fue el epicentro provincial de la cultura y arte durante el Siglo de Oro. Declarada Monumento Histórico-Artístico desde 1974, esta villa forma además parte de la asociación de los Pueblos más bonitos de España, con una estructura urbana muy bien conservada que remite directamente a aquella época paseando por sus calles, como lo hicieron personajes ilustres de nuestra historia.

Aunque no sepamos a ciencia cierta si Cervantes se inspiró en Infantes para situar el domicilio de Don Quijote, sí que dejaron constancia del pueblo escritores como Lope de Vega o Francisco de Quevedo, quien además está enterrado en esta localidad. Es por tanto una visita imprescindible para los amantes de la literatura, pero también para quien disfrute descubriendo un pueblo lleno de encanto, testigo de nuestra historia, repleto de construcciones renacentistas y barrocas, civiles y religiosas.

Con calles simétricas y agradables de recorrer, Villanueva de los Infantes ofrece diversos recorridos para ir fijándose con calma en cada detalle de sus fachadas, escudos y monumentos. Museos, plazas, yacimientos arqueológicos, fiestas locales y un entorno que también merece la pena visitar, este pueblo a un par de horas de la capital es un viaje en el tiempo donde degustar además la más tradicional gastronomía manchega.

Fotos | Villanueva de los Infantes
En DAP | Parece de cuento: este pueblo a una hora escasa de Madrid es una de las escapadas más desconocidas de la sierra
En DAP | A una hora de Málaga, este pueblo blanco es la escapada de primavera perfecta (y tiene una fábrica única en Europa)