Afortunadamente, nuestro país todavía conserva una gran cantidad de pueblos que sobreviven casi en su pequeño microcosmos al despoblamiento rural, y que también escapan aún de la masificación turística. El litoral cantábrico es sin duda un destino ideal para escapar en verano, pero si nos apetece conocer lugares que no salen tanto en las guías de imprescindibles, descubrir el pueblo con el nombre más corto de España es una excusa perfectamente válida.
Pese a que el nombre no es más que una denominación oficial, sentimos debilidad por esos apelativos más llamativos y algo extraños, tanto que a menudo se convierte en la mejor publicidad o atractivo para que los curiosos se acerquen a conocer un lugar que pasaría desapercibido. Ocurre así con Ea, una pequeña localidad situada en la comarca de Busturialdea, en la costa nordeste de Vizcaya, en el País Vasco.
Aunque en el norte de Lanzarote también encontramos una villa con un nombre de solo dos letras, Ye, Ea también es municipio, por lo que se considera así el pueblo con el nombre más corto del país. Casualidad o no, también la propia localidad es de reducidas dimensiones, pero tiene espacio de sobra para reunir muchos atractivos que bien se merecen una visita, convirtiéndolo en una escapada perfecta o punto de partida para una ruta por la zona.
Con menos de 900 habitantes censados y poco más de 14 kilómetros cuadrados, Ea es un pintoresco pueblo de pescadores que conserva todo su encanto histórico perfectamente enmarcado en el entorno natural. El pueblo nació precisamente de asentamientos de pescadores que aprovecharon el puerto natural formado por el río, del mismo nombre. En el siglo XIX se unieron los barrios de Bedarona y Natxitua, otorgándose la municipalidad al pueblo.
La villa está dividida así en dos por el río, con las bonitas viviendas levantadas alrededor de las aguas que se pueden cruzar a través de cuatro puentes, destacando el llamado puente romano, de piedra, convertido en el símbolo y emblema del municipio, y punto obligado de visita.
Una visita a Ea debe incluir el recorrido completo de su precioso casco histórico, pequeño pero muy disfrutable con sus bien cuidadas viviendas y calles de piedra, que transcurren paralelas a la ría. El paseo nos llevará hasta el puerto y la playa principal, aunque también encontraremos bellas calas entre rocas que además son perfectas para practicar submarinismo.
La localidad acoge también un interesante patrimonio cultural y etnográfico, y ofrece diversas rutas de senderismo en el verde paisaje montañoso y y costero de sus alrededores, con magníficas vistas al mar Cantábrico.
Lo mejor del País Vasco 1 (Guías Lo mejor de Región Lonely Planet)
Fotos | Turismo Ea - Euskadi
En DAP | Carolinas de Bilbao, la receta del pastel más famoso de Vizcaya
En DAP | 10 pueblos bonitos y fríos de España a los que escaparse en julio para huir del calor
Ver todos los comentarios en https://www.directoalpaladar.com
VER Comentarios