Cantaba Platero y tú en Tras la barra de un bar que Gorka Limotxo, trabaja camarero, tras cinco años llegó a la conclusión: siempre el cliente no tiene la razón. Y puede que este mito noventero del rock & roll vasco siga teniendo vigencia.
Sobre todo a raíz de uno de los últimos episodios que se han registrado en Twitter a costa de una fea costumbre de muchos comensales: el no show. No es una novedad, pero sí sigue muy vivo el hecho de no presentarse en el restaurante que se ha hecho la reserva.
Más aun cuando hablamos de fechas especialmente señaladas como es la Semana Santa y momentos especialmente sangrantes cuando además se reservan mesas enormes. Es lo que ha sucedido en el restaurante A Centoleira, una marisquería en la localidad pontevedresa de Bueu, en plenas Rías Baixas.
Tras reservar para 11 personas, la interfecta reservante, una tal Ángela, se limitó a decir "lo siento, me olvidé" cuando le telefonearon desde el restaurante para saber el porqué de su acto de desaparición.
Con cierta retranca, desde la cuenta de Instagram del restaurante, se colgó la respuesta a Ángela dándole las gracias. Especialmente por su falta de tacto y también por haber tenido el amago de decencia de coger el teléfono para responder, aun con una respuesta tan chusca como "lo siento, me olvidé".
El problema es que Ángelas hay miles y se reparten por toda España, pues el comensal suele escapar de los lugares que obligan a dejar señales o fianzas por no presentarse. Aun con el descaro de reservar en varios restaurantes a la vez y decantarse a última hora por el que más les convence.
Algo frecuente y especialmente cruel si, sobre todo, se hace con mesas grandes y en fechas señaladas como puede ser la Semana Santa, un momento de gran afluencia de público en determinadas zonas de España y donde estos días fuertes de primavera permiten coger fuerza para aguantar el resto del mes.
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Falta de educación y de consideración que, además, no suele ser recíproca en otro tipo de establecimientos, pongamos por caso los hoteles, donde las reservas están muy bien estipuladas y donde si no apareces, acabas pagando la estancia o parte de ella y que parece el futuro para muchos hosteleros que no quieren ver como se les quedan mesas colgadas y vacías cuando aparece una Ángela.
Imágenes | Twitter Miguel Diéguez y Zar
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