Stop masificaciones: Venecia limita los grupos de turistas a 25 personas y prohíbe el uso de altavoces a los guías

La medida ha entrado en vigor este 1 de agosto en un intento de reducir el impacto del turismo en la ciudad

Venecia
Sin comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail

Mientras los movimientos contra el turismo masivo se multiplican por medio mundo, Venecia ya decidió empezar a tomar cartas en el asunto anunciando el año pasado el cobro de una entrada a quienes pasaran por la ciudad sin pernoctar. A esta tasa se suman ahora dos nuevas restricciones que intentan reducir el fuerte impacto que las masificaciones tienen en la vida de sus vecinos y de la propia urbe.

Desde este 1 de agosto los grupos de turistas quedan reducidos a un máximo de 25 personas, prohibiéndose la entrada de agrupaciones grandes de visitantes formen o no parte de un viaje organizado de cualquier índole. Además, se prohíbe a los guías turísticos usar altavoces para comunicarse, por lo que tendrán que hacer uso de sistemas de micrófonos y auriculares individuales, como suelen tener los museos.

Las autoridades locales tenían previsto poner en marcha estas nuevas restricciones de cara a la compleja campaña de verano, inicialmente para el 1 de junio, pero finalmente se prorrogó hasta el mes de agosto. El objetivo es proteger la tranquilidad de los residentes y asegurar que los peatones, sean vecinos o no, puedan desplazarse sin problemas por la ciudad.

Estas medidas, por el momento, se van a aplicar en el centro de la ciudad de la laguna y las islas de Burano, Murano y Torcello. Quienes no cumplan estas nuevas medidas podrán recibir multas que oscilarán entre los 25 y 500 euros, según cada caso.

Actualmente ya ha finalizado el proyecto piloto de la mencionada entrada de pago para los visitantes de solo un día, aplicada durante un periodo de prueba finalizado el pasado mes de julio tras permanecer activo durante 29 días y que abre un período de consulta para decidir cómo proceder en el futuro.

Venecia2

Venecia está tanteando con estas medidas la manera de frenar las masificaciones que tanto perturban la vida normal de la ciudad, llegando a poner en peligro el propio patrimonio, y lograr así el equilibrio entre un turismo sostenible, con indudable valor económico, y la propia vida de la urbe y sus habitantes, un problema que cada vez preocupa más a multitud de destinos en todo el planeta.

Imágenes | Unsplash/Jose Santos - James Lee

En DAP | Esta ciudad está al lado de Venecia, también tiene canales, pero mucho menos turistas

En DAP | Del huerto al convento: así es el vartanush, la mermelada de pétalos de rosa que elaboran los monjes en una isla de Venecia

Inicio