Aunque la mantequilla no es en España un producto con tanta extensión como en Francia, s etrata de un básico de la cocina, sobre todo para repostería. Esta grasa de la leche obtenida a partir del batido de la nata tiene muchas variantes y no todas son iguales.
Para despejar dudas en este sentido y ayudar a los consumidores a elegir las opciones más interesantes a nivel nutricional, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha realizado una selección de las mejores.
Como base, la mantequilla tradicional se elabora a partir de la crema de la leche, de la que se va eliminando agua (desuerado) hasta alcanzar una masa homogénea con un contenido en grasa superior al 80%. No obstante, la OCU avisa de que en los últimos tiempos han aparecido algunas mantequillas con un porcentaje inferior de grasa.
Muchos tipos de mantequillas
Hay diversas técnicas para su elaboración, diferentes tipos de mantequillas, atendiendo a su composición (según su contenido en sal y en grasas), si son fáciles de untar, su procedencia...
Según eso, hay distintas denominaciones, como la mantequilla con sal y sin sal, la mantequilla a secas (que tiene un mínimo de un 80% de grasa u 82% si no lleva sal añadida), mantequilla tres cuartos (con un contenido de grasa reducido del 60%) y semimantequilla (con un contenido graso del 39%).
También hay mantequillas light (por debajo del 30%), fáciles de untar (con un proceso añadido para mejorar su untabilidad) y denominaciones de origen específicas (en España hay la DOP Alt Urgell i la Cerdanya y DOP Mantequilla de Soria).
Grasa y vitaminas
Debido a su origen lácteo, la mantequilla presenta alta concentración de grasas saturadas, de la misma composición que la nata: ácido butírico (C4:0), mirístico (C14:0) y palmítico (C16:0). También contiene colesterol (250 mg/100 g).
También tiene una presencia testimonial de lactosa, el azúcar que contiene la leche. Por el proceso de elaboración, sólo está presente como un ligero rastro. Cuenta con vitaminas liposolubles: a mantequilla es una fuente interesante de dos vitaminas liposolubles: la vitamina A y la D.
Para ayudar a los consumidores, la organización ha comparado la composición de 63 mantequillas (21 mantequillas con sal añadida, 30 sin ella o tradicionales y 12 ligeras), y valoración de su calidad nutricional en función de la escala saludable OCU, que además de grasas, sal, azúcar tiene en cuenta los aditivos.
Además, está la valoración Nutriscore de cada producto: obviamente, se trata de productos ricos en grasas (sobre todo saturadas) y algunos también en sal, lo que explica que sus valoraciones se repartan entre la D y la E, que son las peores notas posibles.
Es importante tener en cuenta que las mantequillas ligeras tampoco se libran; pese a llevar menos grasas, su calidad nutricional en global es similar a la de las mantequillas tradicionales (incorporan colorantes y otros aditivos, espesantes y emulsionantes, que ayudan a mantener la textura del producto).
Estos resultados ponen de manifiesto que las mantequillas son un producto que debe consumirse en pequeñas cantidades y no a diario: para tus desayunos, mejor optar por el aceite de oliva.
El podio
Entre las mejores mantequillas, la OCU le ha dado el lugar más alto a Únicla Mantequilla, con una puntuación de 43 y calificación de elección saludable. Sus ingredientes son nata pasterizada y no tiene aditivos.
Le sigue la Mantequilla Tradicional Alipende, de la cadena de supermercados Ahorramás, con una puntuación de 40. Esta tiene nata pasterizada y fermentos lácticos.
Con la misma puntuación y los mismos ingredientes que la anterior, la OCU sitúa Arias Mantequilla Tradicional, otra elección aceptable a nivel nutricional.
Finalmente, destaca Bayernland Gold Butter, una mantequilla con los mismos ingredientes que las anteriores.
Foto | Karolina Kaboompics, Felicity Tai y OCU
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