Los frutos secos tienen muy mala fama: su gran aporte calórico los ha llevado tradicionalmente al ostracismode los alimentos saludables y muchos ni siquiera consideran su adición a una dieta equilibrada.
Sobre los frutos secos pesa el mantra de que albergan montones de calorías y, en realidad, eso es así, lo que no quita que, efectivamente, son al mismo tiempo, benéficos alimentos en lo que a nutrientes se refiere.
La nutricionista popular en redes @comiendoconmaria ha compartido una reflexión al respecto animando a considerar su presencia en los platos principales para sacar provecho de sus ventajas.
En concreto, ha explicado que es un alimento muy nutritivo, que aporta fibra, grasa, proteínas y minerales, además del hecho de que son muy versátilesy se pueden poner en la ensalada, como snack, o en salteados, en crema, polvo o yogurt.
En el caso de los frutos secos, admite que pesa sobre ellos la constante pregunta “¿pero no engorda mucho?”, y ciertamente es un alimento calórico que suma entre 600 y 800 caloríaspor cada 100 gramos.
Ella defiende su presencia si respetamos la cantidad de consumo y hacemos una ingesta de frutos secos crudos o tostados, que no sean salados, fritos o garrapiñados, y que se incluyen en diferentes recetas con una alimentación variada y equilibrada, con un buen estilo de vida.
“Si acompañamos los frutos secos como tienen que ser no van a engordar”, afirma. Además, recuerda que hay muchos estudios sobre la presencia de frutos secos en dietas hipocalóricaspara personas que quieren perder peso, que dan “más resultados y mejores” que, en el mismo estudio, las personas que no los consumían.
@comiendoconmaria Si quieres perder peso, deberías empezar a comer frutos secos. #dieta #perderpeso #adelgazar #nutricion #nutricionista #nutricionistaonline #comiendoconmaria
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Esto es así porque la saciedad que aportan con su proteína, fibra y grasa hacen que las personas tengan unos mejores niveles de insulina y glucosa y que se esté mucho más tiempo saciado, calmando la ansiedad y dando más tranquilidad. Esta sensación se debe a que no hacen sentir hambre tan temprano.
En cuanto a la cantidad, la especialista destaca que la ración ideal es la que cabe en el puño de una mano, que suele ser interpretada a la baja por sus pacientes. Por ejemplo, estos suelen introducir tres avellanas, cantidad por debajo de los entre 30 y 50 gramos que se recomiendan.
Foto | Marta Branco
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