Ya es un clásico de estas fechas: las calçotades acompañan los meses de frío con una propuesta divertida y muy saciante. También, con la llegada de la temporada de calçotades, los supermercados españoles han entrado en una auténtica batalla por ofrecer las mejores promociones.
Mercadona, Esclat y Carrefour han lanzado diferentes ofertas para atraer a los consumidores y facilitar la celebración de esta tradicional comida catalana que cada vez es más habitual ver en todas las latitudes de la península.
El calçot, una variedad de cebolla tierna alargada, es el protagonista indiscutible de esta festividad gastronómica arraigada en Valls, pero con muestras en toda Catalunya. Estos se asan directamente sobre las brasas hasta que la capa exterior queda completamente negra, para después pelarlos y mojarlos en la salsa de calçot.
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Acompañados de carne a la brasa y maridados con vino o cava, los calçots son la excusa perfecta para reunir a familiares y amigos en cualquier masía rústica o, por qué no, en casa, donde cada vez los consumen más los fanáticos de esta cebolla.
Este año, Mercadona ha puesto a disposición de sus clientes manojos de calçots procedentes de Mont-roig del Camp, una de las zonas de producción más reconocidas (con permiso de Valls), a un precio de 4,95 euros el manojo de 25 unidades (con un peso aproximado de 2,5 kilos).
Esclat, por su parte, ha lanzado una promoción que incluye un manojo de calçots de kilómetro cero y una salsa de la casa Ferrer, de consumo muy extendido en Catalunya. El precio de valoración del lote, de 7,64 euros, se ha reduce hasta los 5,99 euros, con un descuento del 27% válido hasta el 17 de febrero.
Carrefour también ha entrado en la competencia con su propia oferta: un manojo de 1 kilo de calçots por 4,99 euros, en este caso sin salsas ni complementos. Pese a estas ofertas en grandes cadenas de distribución, desde ya hace algunas jornadas los calçots se encuentran en cualquier frutería de mercado, super e incluso en gasolineras de la zona.
La variedad de opciones permite a los consumidores elegir entre la comodidad de un pack listo para la calçotada o la flexibilidad de comprar solo los calçots para cocinarlos al horno y preparar la salsa por cuenta propia, aunque para esta hay que tener cierta mano.
Foto | Miguel Ayuso/DAP