No son buenos tiempos para el multimillonario ruso Mikhail Fridman, máximo accionista de los supermercados Dia, al que una juez ucraniana ha confiscado toda su fortuna, valorada en unos 400 millones de euros.
La noticia, según una información de la fiscalía general de Ucrania, permite requisar estos activos, pues se trata de valores en empresas chipriotas que se encontraban en Ucrania. No es el primer mazazo para Friedman tras la invasión de Rusia a Ucrania, pues ya ha sido sancionado con anterioridad por la Unión Europea.
En aquella primera instancia se trataba de una respuesta del ente comunitario al ataque ruso, pero ahora se va un paso más allá, ya que se trata de una confiscación de activos y su consecuente paralización.
En este sentido, ya sus cuentas británicas también fueron congeladas hace varios meses, estableciendo además un límite de gasto mensual para Fridman de unos 3.000 euros al mes. Metido en el saco de los oligarcas rusos sobre los que pesan sanciones personales, Friedman ha reconocido en varias ocasiones que "las sanciones personales contra los oligarcas no son un instrumento preciso".
A pesar de haberse posicionado contra una guerra que "debe parar ya", como afirmó al diario económico Expansión, el multimillonario ruso que se hizo con el control del grupo Dia en 2019, poco antes de desatarse la pandemia.
Esta congelación, además, supone paralizar los activos, pero en ningún caso suponen una expropiación, un terreno completamente inexplorado por parte de las sanciones llevadas a cabo por la Unión Europea, Estados Unidos o Reino Unido, los tres entes que hasta ahora han tomado este tipo de medidas.
Imágenes | DIA/LetterOne
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