La candidatura ‘Cultura sidrera asturiana’ promovida por el Gobierno del Principado de Asturias ha sido declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Se ha decidido así este miércoles en la 19ª sesión del Comité Intergubernamental de Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial, celebrado esta semana en Asunción (Paraguay).
Esta candidatura fue aprobada por el Consejo de Patrimonio Histórico español en el año 2021, refiriéndose bajo el término de ‘cultura sidrera’ a todo el conjunto de prácticas vinculadas a los procesos de producción, distribución y consumo de sidra natural. Se considera que su valor va más allá del propio producto, la sidra, pues su larga tradición histórica y el vinculación al territorio asturiano la convierten en un sentimiento de identidad personal y de pertenencia a la comunidad.
La UNESCO reconoce que la sidra es un símbolo de identidad local, cuyo gusto “se considera la encarnación de la relación entre las comunidades rurales y su entorno”, pues el conocimiento de su elaboración y consumo, desde el cultivo de los manzanos hasta el consumo comunal, se transmite de generación en generación al menos desde la Alta Edad Media. Es una cultura que genera sus propios rituales y espacios, favoreciendo la integración y socialización de la población asturiana, ayudando asimismo a preservar los paisajes rurales naturales el territorio.
Además, la UNESCO destaca que la cultura sidrera forma un todo con la cocina tradicional y es parte fundamental de numerosos eventos y fiestas locales, como los peregrinajes, los concursos de degustación y servicio de la sidra, los amagüestos, fiestas de la castaña, y las espichas o fiestas de la sidra.
Imagen | Consejo Regulador de la DOP Sidra de Asturias
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