Poco ha tardado en producirse la primera reacción popular a la noticia de la apertura de la 'Taberna Garibaldi', el bar con pretensiones gastroviejunas “para rojos” que Pablo Iglesias ha montado en pleno barrio Lavapiés de Madrid. Como ha compartido Pablo Caldera en la red social X, hoy amanecía con pintadas anarquistas en su fachada exterior.
Iglesias anunciaba la semana pasada la apertura definitiva de su proyecto el martes 19 de marzo, Día del Padre, ocupando un conocido local en el barrio madrileño por haber acogido el popular bar 'El dinosaurio todavía estaba allí', muy fácil de identificar por conservar en su exterior una decoración castiza de azulejos rememorando un clásico salón de peluquería para caballeros.
Conociendo la polémica figura de Iglesias, el lugar elegido y el poco interés por pasar desapercibido en su proyecto hostelero, cabía esperar algún tipo de respuesta popular hacia el local, que ya acumula reseñas negativas antes de abrir en Google Maps. En este caso, las pintadas tampoco se han hecho esperar.
El mensaje es bastante claro y alude directamente a uno de los cócteles que aparecen en la carta de la taberna, que juega con referencias políticas buscando caer en gracia o simplemente levantar polémicas para viralizarse. En concreto, la pintada exige la “retirada inmediata del cóctel Durruti” un Dry Martini- amenazando además de que, si no lo hace, “”el proletariado anarquista pasará a la acción”.
Buenaventura Durruti, nacido en León, fue una de las figuras más relevantes del movimiento anarquista español de principios del siglo pasado, y de la propia organización sindical CNT. Murió en Madrid con 40 años combatiendo en la Guerra Civil contra las tropas franquistas en el bando republicano, liderando una la formación de milicianos conocida en su honor como columna Durruti.
Imágenes | Pablo Caldera en X