Como bien dice el refrán, a nadie le amarga un dulce, y menos si se es una persona golosa como yo. Toda buena comida que se precie termina con un buen postre, y por eso es una pena cuando ese último bocado no nos sienta del todo bien. Y es que un intolerante a la lactosa parece que lo tiene difícil a la hora de los dulces, pero a lo largo de estos meses hemos visto cómo podemos preparar y disfrutar de los mejores postres sin lactosa.
Cocinar nuestros propios postres en casa siempre es una idea estupenda, y si además podemos asegurarnos de que sentarán bien a toda la familia, mucho mejor. Con un poco de creatividad podemos seguir disfrutando tanto de los postres más tradicionales, por ejemplo magdalenas o arroz con leche, como de dulces más originales con un toque especial. Tenemos propuestas para todos los gustos, ¿os animáis a preparar vuestros propios postres sin lactosa con nosotros?
Dulces tradicionales más ligeros
Ser intolerante a la lactosa no es ningún impedimento para los amantes de los postres españoles más tradicionales, en los que los productos lácteos ocupan un papel fundamental. El arroz con leche, que a mí tanto me recuerda a mi infancia, seguirá saliéndonos riquísimo elaborado con leche sin lactosa. Al igual que la típica leche frita, mucho más digestiva al olvidarnos de la lactosa en su elaboración.
Quizá os parezca que son más propias del desayuno o la merienda, pero las clásicas magdalenas son tan dulces y esponjosas que en mi casa con frecuencia las tomamos de postre. Lo mismo sucede con las tortitas americanas, ahora ya un clásico también en nuestros hogares, deliciosas con chocolate o mermelada. Más típicos de nuestras fronteras son los fartons valencianos, un tierno dulce que acompaña de maravilla el café tras la comida.
Disfrutando de la fruta sin lactosa
La fruta siempre es una opción saludable, por lo que convertirla en protagonista de nuestros dulces no sólo dará sabor sino que también enriquecerá los postres. Para terminar con un bocado ligero pero goloso una comida, la ensalada de frutas con salsa de yogur de fresa es una elección estupenda y llena de vitaminas. Más contundente pero también muy nutritivo resulta el pastel de naranjas y almendras enriquecido con nata sin lactosa, perfecto para cargar las pilas en otoño.
Hay frutas como las cerezas que por su colorido hacen destacar especialmente el postre, y tenemos dos ricos pasteles como ejemplo. Nunca falla la tarta con base crujiente y relleno de nata, pero si necesitamos una receta más rápida y sencilla el clafoutis, postre francés, es otra buena opción. Y podemos adaptar este tipo de recetas a la fruta de cada temporada, y disfrutarlas todo el año.
Ricos bizcochos para todos los gustos
Siento especial debilidad por las masas de bizcocho porque muy sencillos y versátiles, nos dan mucho juego en la cocina y a la hora de presentarlos en la mesa. Para el día a día podemos optar por recetas más rápidas como el bizcocho de chocolate sin lactosa al microondas o el nutritivo bizcocho integral con puré de manzana y leche sin lactosa.
Otro clásico de nuestras cocinas es sin duda el bizcocho de aceite y leche sin lactosa, con el que podemos jugar añadiendo trocitos de chocolate o aromas diferentes. Y si queremos sorprender a la familia o tenemos invitados, el vistoso bizcocho enrollado de mermelada y nata hará las delicias de todos.
Batidos y helados todo el año
Para finalizar nuestro dulce recorrido, no podíamos olvidarnos de los postres más refrescantes. Aunque el verano haya quedado atrás, eso no tiene por qué impedirnos de seguir disfrutando de batidos y helados, pues son postres adecuados para todo el año, y una opción más ligera para finalizar una comida. También podemos añadirles fruta a nuestro gusto y convertir el postre en recetas llenas de vitaminas, como el batido de plátano y chocolate, los polos de cereza y yogur o el helado sin lactosa de chocolate con naranja.
Como podéis ver, el abanico de postres que podemos elaborar en casa es de lo más variado, con opciones para todos los gustos y cualquier ocasión, ya sea el día a día familiar o una celebración con invitados. Tomados con moderación los dulces pueden ser parte de una dieta equilibrada, y mucho mejor si son caseros. Todos podemos deleitarnos de un buen postre sin lactosa y disfrutar de digestiones más ligeras. ¿Cuál es vuestro postre favorito?
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Liliana Fuchs es una joven murciana que se trasladó a Madrid después de licenciarse en Historia de arte. Hace años le detectaron intolerancia a la lactosa pero eso no ha impedido que siga disfrutando de una de sus pasiones, la cocina rica y saludable. Actualmente es editora en Directo al Paladar