¿A quién no le gustan las magdalenas? Yo al menos no conozco a nadie que pueda rechazarlas, y es que estos dulces abizcochados de formato individual son una delicia a la que es difícil resistirse. Estoy segura de que están presentes en muchos hogares, pero yo os animo a hacer vuestras propias magdalenas sin lactosa en casa.
Utilizando ingredientes sin lactosa y añadiendo los aromas que más nos gusten, podemos tener unas ricas magdalenas caseras listas en poco tiempo para el desayuno o la merienda. Podéis usar ralladura de limón o de naranja, añadir un toque de canela o vainilla, trocitos de chocolate, o lo que más os guste.
Ingredientes para 12 magdalenas
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210 gr de harina de repostería, 5 gr de levadura química (impulsor), 1 pizca de sal, 2 huevos L, 170 gr de azúcar, 185 ml de aceite de girasol, 60 ml de leche semidesnatada sin lactosa, aroma al gusto (canela, ralladura de limón o naranja, vainilla, etc.).
Cómo hacer magdalenas sin lactosa
Mezclar la harina con la levadura y la sal en un cuenco. En otro recipiente más grande, batir con una batidora de varillas los huevos con el azúcar a velocidad alta, hasta conseguir una mezcla pálida y densa. Añadir el aceite de girasol y la leche semidesnatada sin lactosa, batiendo un poco más.
Tamizar por encima, con ayuda de un tamizador o un colador grande, la mezcla de harina anterior, incorporándola con una espátula o cuchara. Añadir el aroma deseado y volver a batir a alta velocidad, durante por lo menos tres minutos. Tapar con papel film y dejar reposar en la nevera como mínimo una hora.
Precalentar el horno a 225ºC y preparar una bandeja de moldes con cápsulas de papel, o moldes de silicona. Rellenar tres cuartas partes de cada molde con la masa. Cubrir con azúcar por encima, si se desea, e introducir en el horno. Bajar la temperatura a 210ºC y hornear durante unos 12-15 minutos, hasta que estén doradas al gusto.
Dificultad | Fácil
Tiempo de elaboración | 40 minutos, más el enfriado
Degustación
Una vez se hayan enfriado ya podemos disfrutar de nuestras magdalenas sin lactosa en el momento que más nos apetezca. Como decía al principio, son ideales para el desayuno o la merienda de toda la familia, acompañadas de un buen vaso de leche sin lactosa bien fresquito, que es lo que apetece ahora.
Liliana Fuchs es una joven murciana que se trasladó a Madrid después de licenciarse en Historia de arte. Hace años le detectaron intolerancia a la lactosa pero eso no ha impedido que siga disfrutando de una de sus pasiones, la cocina rica y saludable. Actualmente es editora en Directo al Paladar
