Desde sus orígenes, el gazpacho ha servido como bebida refrescante. Primero para los trabajadores del campo que necesitaban un alimento nutritivo pero asequible a sus economías, y después para el resto de clases, responsables de incorporar hortalizas a la receta base para hacerla más distinguida.
Dar con dos recetas de gazpacho iguales es tan complicado como encontrar una aguja en un pajar. Libertad y creatividad en torno a sus elementos son inherentes al gazpacho y traen como resultado gazpachos muy locos. No obstante, la base es siempre la misma: una emulsión de aceite en agua fría que se tritura junto con "otros ingredientes" hasta conseguir una crema fina.
El carácter diferenciador del gazpacho
Generalmente, son estos "otros ingredientes" los que aportan el carácter diferenciador al gazpacho, así como sus acompañantes y aderezos. Hay quienes condimentan el gazpacho con comino o pimentón, quienes lo sirven con tacos de jamón serrano, huevo picado, frutas, aceitunas y un sinfín de tropezones.
Sin duda alguna el gazpacho es uno de los platos españoles más internacionales que existen y su receta, tan tradicional e histórica, no ha podido escapar a las ansias de reinvención que mueve a muchos amantes de la cocina. Desde los más grandes, como Ferrán Adriá y su afamado gazpacho de bogavante, o Dani García con su delicioso gazpacho de cerezas, queso fresco y anchoas, entre otros.
Gazpachos como estos han marcado un hito en su historia, pero también hay muchos otros que son dignos de reconocimiento, que desbordan creatividad, que provienen de manos anónimas o de cocineros menos estrellados y que merecen la pena una mención. Porque son gazpachos tan locos y divertidos como los que más.
11 gazpachos muy locos
Jugar con los ingredientes da mucho de si y, aunque sea quizás lo más extendido, hay una serie de gazpachos muy locos que nos encantan como el de mango, pepipo y mascarpone, el gazpacho de guisantes con menta y lima, el gazpacho de hierbabuena, el gazpacho a la búlgara o el gazpacho de los tres golpes.
En el caso de los gazpachos de frutas y hortalizas, la clave está en reducir una parte, o la totalidad, del tomate de la receta original y sustituirlo por alguna otra fruta u hortaliza. Como podéis ver, hay versiones muy interesantes, aunque puede que a los puristas del gazpacho se les estén poniendo los pelos de punta.
También se puede jugar con la presentación y obtener resultados asombrosos. Aquí, más que en cualquiera de los ejemplos anteriores, la imaginación y creatividad son ingredientes indispensables. Dos grandes muestras son las piruletas de gazpacho y los chupitos de pepino rellenos de gazpacho en los que el recipiente es 100% comestible.
Una última opción es la de cambiar la temperatura de servicio del gazpacho y servirlo a la más apetecible en épocas de calor: helado. En esta idea se basa el flash o polín de gazpacho, los polos de gazpacho, el sorbete de gazpacho de cerezas o el helado de gazpacho. Y vosotros, ¿tenéis algún gazpacho loco que añadir a nuestra lista?
Imágenes | Azúcarglass, Tarjeta de embarque, y La receta de la felicidad
En Directo al paladar | Nueve refrescantes sopas frías y gazpachos para sobrellevar el calor
En Directo al paladar | Once gazpachos de once sabores y dos recetas con gazpacho