Los cuidados que necesita tu higuera en septiembre para tener para una cosecha de higos de ensueño el próximo año

Es fundamental seguir ciertos pasos que favorezcan el buen desarrollo de la planta y, sobre todo, de sus frutos

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Tener un jardín o terraza con higueras puede ser una verdadera delicia, sobre todo cuando las higueras producen frutos grandes y jugosos. Sin embargo, lograr obtener higos de gran tamaño no siempre es sencillo.

Para conseguir este objetivo, es fundamental seguir ciertos pasos que favorezcan el buen desarrollo de la planta y, sobre todo, de sus frutos. Y en septiembre la buena noticia es que puedes dar muchos de estos pasos, y no en falso.

El riego es un aspecto crucial para obtener higos grandes. Aunque la higuera es una planta resistente a la sequía, si se quiere que los frutos crezcan grandes y jugosos, el riego debe ser regular y adecuado.

Una poda a tiempo

La poda es una práctica clave para obtener higos más grandes. Es fundamental podar la higuera correctamente en septiembre para que los nutrientes se concentren en el crecimiento de los frutos en lugar de en las ramas o el follaje.

Durante la poda, se deben eliminar las ramas débiles o mal ubicadas, así como aquellas que impidan el paso de la luz al centro del árbol.

La poda adecuada garantiza una mejor circulación del aire y una mejor exposición solar, factores que favorecen la maduración y el tamaño de los higos.

Ojo a las plagas

El control de plagas es otro aspecto a tener en cuenta en esta época (pero también el resto del año). Las higueras, aunque generalmente resistentes, pueden verse afectadas por algunas plagas que interfieren en la calidad y el tamaño de los frutos. Entre las plagas más comunes se encuentran los pulgones, la mosca de la fruta y los ácaros.

Es importante mantener el suelo ligeramente húmedo, especialmente durante la temporada de crecimiento y fructificación. Un riego insuficiente puede hacer que los higos se queden pequeños o no se desarrollen bien. Por el contrario, el exceso de agua puede causar problemas de pudrición de raíces o dañar los frutos.

La fertilización juega un papel igualmente esencial. Para estimular un buen desarrollo de los higos, es recomendable abonar la higuera en los meses de primavera y verano, cuando la planta está en pleno crecimiento.

Un abono rico en potasio y fósforo favorece la formación de frutos grandes y sanos. Sin embargo, hay que tener cuidado de no excederse con el nitrógeno, ya que esto puede estimular el crecimiento excesivo de las hojas de la planta en detrimento del tamaño de los frutos.

Asimismo, es esencial cosechar los higos en el momento adecuado. Los higos que se dejan en el árbol demasiado tiempo pueden volverse blandos y perder calidad.

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Por eso, es importante recolectarlos cuando están maduros pero aún firmes, y consumirlos rápidamente o conservarlos de manera adecuada para disfrutar de su sabor y textura en su mejor momento.

Foto | Azerbaijan_stockers

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