Por muchos huevos que haya abierto a lo largo de mi vida, la práctica no me libra de tener que lidiar con cáscaras espachurradas, yemas rotas y pringues varios. Miro fascinada a quienes consiguen abrirlos en cuestión de décimas de segundo solo con una mano, dejando caer un huevo crudo perfecto e impoluto al cuenco o sartén. Magia de titiritero a mis ojos.
Hasta ahora siempre he seguido el método básico para abrir bien los huevos, golpeándolo contra el borde de un plato o cuenco a través de una hoja de papel de cocina, pero no siempre da los resultados esperados. Por mi propia torpeza innata las variables del propio huevo, a veces el golpe se queda corto y se abre mal por la grieta, otras se rompe de más, o caen trocitos de cáscara junto con el huevo crudo, la yema se rompe, etc.
Más allá de las molestias de lidiar con restos de huevo crudo y sus riesgos sanitarios, el mayor problema radica en las ocasiones que necesitamos el huevo intacto, o más concretamente, la yema. Para hacer huevos escalfados, o unos simples huevos fritos perfecto, para separar claras y yemas... si se nos rompe, mal vamos.
Cuando leí comentarios sobre el truco que casi garantiza al 100% una yema impoluta, tenía que probarlo. Dicho y hecho; ahora ya no lo hago de otra manera.
Es tan sencillo como dejar que la gravedad haga su efecto. Lo único que hay que hacer es disponer de un plato o superficie plana limpia y firme, mejor si la cubrimos con una servilleta o papel de cocina, sujetar el huevo fresco en posición horizontal, a unos 15 cm de distancia, y soltarlo sin miedo.
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El huevo se habrá roto sin perforar la membrana interior, dejando visibles las grietas limpias por las que tendremos que presionar con los dedos para, ya sí, abrirlo en dos y dejar caer el interior. Esta técnica evita que la cáscara se rompa hacia dentro, pues al golpear contra una superficie plana la membrana permanece intacta y la apertura es mucho más limpia.
Desde que lo pongo en práctica no he tenido más yemas rotas ni trocitos de cáscara perdidos en el cuenco que luego cuesta tanto retirar.