Parece que está de moda hacer lámparas con todo tipo de alimentos. Suesslicht es una lámpara de azúcar, pero anteriormente hemos visto lámparas de chocolate, con osos de gominola y de gelatina comestible. Vamos, que podríamos iluminar la casa entera con ellas.
De nombre tremendamente descriptivo (süß es dulce en alemán, y Licht luz), esta lámpara diseñada por el estudio Voxel es un perfecto ejemplo de trabajo interdisciplinar, ya que para poder realizarla debieron recurrir al conocimiento de varios expertos azucareros, y de como algunos alimentos tienen muchas más posibilidades de las que pensamos.
La belleza de esta lámpara reside no solo en la curiosidad de que esté hecha de azúcar, o de que podamos arrancarle un trozo para endulzar el café, sino en que es al mismo tiempo un homenaje a la fabricación tradicional del azúcar y al diseño industrial más eficiente.
La pantalla tiene la forma en la que antiguamente se refinaba y vendía el azúcar, en concreto hasta finales del siglo XIX, cuando se introdujo el azúcar granulado y en terrones. Además, al ser una pantalla muy fina, de solo un centímetro de espesor, permite el paso de la luz creando una atmósfera difusa y agradable.
Según sus diseñadores, utilizar azúcar como material les ha aportado muchas ventajas, ya que tiene un acabado como estucado, un color blanco puro como la nieve y el tacto y el sonido de la cerámica. Para conseguirlo, mezclaron cristales de azúcar con una solución de agua, para luego moldearlo a altas presiones y secarlo.
Sea como fuere, esta lámpara de azúcar me parece realmente bonita, aunque no la recomendaría para lugares en los que haya muchas moscas, o se acabarán comiendo la lámpara.
Vía | Design Milk Más información | Voxel Studio En Directo al Paladar | Light au lait. Lámparas hechas con pocillos de café
