Seguimos preparando ya a toda máquina las fiestas y hoy lo hacemos con propuestas de platos para que las comidas y cenas no nos pesen tanto. Seguro que en esta selección de 47 recetas ligeras de Navidad encontráis muchas ideas para vuestros menús y no habrá ni una sola queja entre los invitados.
Ya vimos que la Navidad más tradicional puede ser sana, pero hoy nos queremos centrar en ofreceros un repertorio variado de propuestas tan ligeras como festivas. Un plato puede ser saludable pero contundente; en esta ocasión encontraréis ideas con menos calorías y nada pesadas que siempre vienen bien para aligerar los menús navideños.
Aperitivos y entrantes
Cuando buscamos aperitivos para el picoteo previo al menú propiamente dicho evitaremos las masas y el exceso de hidratos de carbono. Pan, tartaletas, biscotes, galletas saladas, hojaldre, picos, rosquillas, tostas... no solo suman calorías, también van llenando de más el estómago quitando sitio a los demás platos.
Podemos dejar de lado los canapés tradicionales apostando por brochetas o pinchos, o sirviendo los bocados en cucharitas individuales, vasitos o mini bandejas. Algún buen embutido se puede admitir, pero de calidad, con poca grasa y en raciones controladas, como las brochetas de pato, mango y uvas, o cambiándolo por carne magra sirviéndola como los rollitos de carpaccio con rúcula y dátiles. Pero si hay un entrante saludable por excelencia ese es el tartar de atún, que bien hecho siempre triunfa. Os dejamos ya mismo la receta completa.
Troceamos el lomo de atún atún en piezas muy finas, es decir, lo picamos. Este proceso lo hacemos a cuchillo, por lo que necesitamos de uno que esté bien afilado, de lo contrario, en lugar de trocearlo, lo machacaremos. Mezclamos el atún picado con la salsa de soja y la salsa wok y lo dejamos macerar en la nevera durante 15 minutos. Picamos el pimiento en brunoise fina y, en una sartén, lo sofreímos en una cucharada de aceite de oliva, a fuego muy lento. Una vez listo, retiramos la sartén del fuego y dejamos que el pimiento se enfríe. Mientras tanto, picamos finamente el apio y también las alcaparras. Cuando el pimiento se haya enfriado, lo agregamos al atún picado junto con el apio y las alcaparras. Removemos. Por último, incorporamos la salsa mayonesa y el zumo de limón. Removemos nuevamente hasta integrar y servimos inmediatamente sobre hojas de cogollos de lechuga, lavadas y escurridas, y espolvoreado de semillas de sésamo, para aportar un toque crujiente.
Otros aperitivos ligeros:
- Brochetas de pulpo y champiñones
- Brochetas de champiñones balsámicos
- Tartar de langostinos, mango y aguacate
- Brochetas de rape y tomatitos
- Tacos de atún marinado al tomillo y limón
- Canapé de anchoas con aguacate, queso y caviar vegetal
- Salmón gravlax o a la escandinava
Primeros platos
En los primeros platos la cosa está clara: ensaladas y cremas suaves son la mejor opción para seguir con un menú relativamente ligero. Pero cuidado con los añadidos que van sumando calorías y pesadez, tales como salsas o aliños excesivos, mucho queso, embutido o picatostes.
Las verduras y hortalizas frescas son ligeras y refrescantes pero también sacian mucho momentáneamente, así que es mejor no ser muy generoso con las raciones. Si queréis más lujo en la mesa el marisco es la mejor alternativa, pues es rico en proteínas y apenas tiene grasas. Los mejillones a la provenzal o en salsa marinera son además económicos y muy sencillos de preparar.
- Bisque de langostinos
- Ensalada crujiente de lombarda
- Ensalada de col lombarda y manzana
- Crema de lombarda con hinojo y sidra
- Lombarda braseada con manzana, castañas y naranja
- Sopa de marisco
- Navajas al horno
- Vieiras a la plancha con agua de tomate a la hierbabuena y lima
Pescados
Si elegimos pescado como plato principal ya habremos dado un gran paso hacia lograr un menú de Navidad más ligero. Ya que vamos a darnos un capricho presupuestario especial, la clave está en escoger un buen ejemplar de verdadera calidad; entonces no hace falta vestirlo ni disfrazarlo con hojaldre ni salsas calóricas.
La lubina a la sal es mi elección personal en este caso, un manjar de lo más saludable si se prepara bien, y con los trucos de Pakus es facilísimo triunfar con ella. El salmón es más graso pero tampoco nos vamos a volver locos por ello, además sus grasas son saludables y es una gran fuente de proteínas. Podemos por ejemplo cocinarlo al horno con salsa de cítricos y jengibre para sorprender con un toque exótico.
- Ceviche de merluza, langostinos y mandarina
- Bacalao con crema de guisantes
- Papillote de bacalao y hortalizas
- Bacalao skrei con crema de hinojo y juanolas de ajo negro
- Rape en salsa verde de cilantro
- Lubina asada con hortalizas de raíz a la sidra
- Rodaballo a la plancha con salsa ligera
Carnes
Asociamos los platos de carne con más grasa y más calorías, pero todo depende del tipo, del corte y de la preparación. Al final la distinción entre carnes blancas y rojas puede llevar a error, ya que sería más ligera una receta de redondo de buena ternera que unas alitas de pollo con piel. Como norma general, evitaremos el cordero, el pato, las aves con piel y los cortes de costillas, chuletas y entrecot.
El solomillo de cerdo es un corte de carne magro, de fácil digestión, económico y que da mucho juego en la cocina. Tenemos una gran cantidad de recetas con esta carne, como el solomillo con salsa de uvas o el solomillo en salsa de cerveza y miel con cebollitas y castañas, muy navideñas las dos. Si hay muchos comensales en la mesa, un buen pollo o pavo asado es un clásico que nunca falla en las grandes ocasiones.
- Solomillo de buey al horno con salsa de vino tinto
- Solomillo de cerdo laqueado a las cinco especias
- Muslos de pollo al horno
- Pollo al horno con limón
- Codornices sobre col lombarda
- Codornices en salsa de mandarina y miel
- Solomillo de pavo en salsa de naranja y mostaza
- Ternera blanca asada con salsa de cebolla confitada
Postres
Para elegir un postre ligero no hay mucho secreto: frutas, sorbetes, mousses y cremas serán nuestra mejor opción. Es interesante apostar por postres ligeros no solo para evitar sumar demasiadas calorías al menú navideño, también lo agradecerá el estómago si hemos comido demasiado.
Nadie se llevará una decepción si presentamos fruta sabrosa de buena calidad con algo de estilo. Una macedonia bien vistosa en copas o cuencos bonitos, aderezada con hojas de menta o una pequeña bola de sorbete será muy agradecida, lo mismo que un carpaccio de piña con vainilla, coco y granada bien colorido.
Para hacer una mousse o postre cremoso lo ideal sería olvidarnos de la nata montada -aunque una pequeña porción tampoco sería tan grave si la montamos en casa sin azúcar-; para ello podemos utilizar en su lugar claras de huevo montadas, yogur o un queso fresco tipo quark. Si no queremos prescindir del chocolate, hay opciones ligeras, siempre buscando el mayor porcentaje de cacao posible que, aunque más calórico, también es mucho más saludable.
- Tiramisú de mango
- Tarta de queso ligera
- Mousse de chocolate vegana esponjosa con dos ingredientes
- Mousse ligera de frutos rojos
- Sorbete de mandarinas y granada
- Sorbete de cava, naranja y limón
- Sorbete de tomillo
Espero que con estas recetas ligeras de Navidad hayamos demostrado que es posible servir platos de fiesta sin pecar de exceso tras exceso. Recordemos que siempre es mejor la calidad, y es que creo que nuestro primer gran error en estas fechas es pasarnos con las cantidades, no tanto con los platos en sí. Hay que encontrar el equilibrio para disfrutar de las fiestas, que al final es de lo que se trata.
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