¿Te apetece un plato tradicional y sencillo? Descubre cómo preparar unos deliciosos caracoles a la montañesa, una receta llena de sabor que combina ingredientes de toda la vida.
Los caracoles a la montañesa son un plato muy típico de la cocina cántabra –dónde se suelen preparar en Nochebuena–, pero también del País Vasco: un plato que con ingredientes muy asequibles es toda una delicia para el paladar.
Para prepararlos solo tendrás que hacer un sofrito con cebolla y ajo, tomar nota del resto de ingredientes, y seguir esta sencilla receta de caracoles paso a paso con la que tendrás el mejor resultado. Te adelantamos que aunque pueda parecer algo laborioso, es mucho más sencillo de lo que parece, ¡la clave está en la cocción de la salsa a fuego lento!
En primer lugar chafamos y pelamos los ajos para sofreírlos en una cucharada de aceite de oliva bien caliente un par de minutos. Agregamos la cebolla pelada y picada y la cocinamos hasta que quede doradita.
Retiramos el ajo de la cazuela y agregamos la panceta picada en daditos pequeños, los taquitos de jamón y el chorizo picado del mismo modo que la panceta. Cocinamos las carnes dos minutos.
Agregamos entonces la carne del pimiento choricero, la salsa de tomate y la hoja de laurel, sazonamos al gusto, y dejamos cocer 10 minutos a fuego lento.
Añadimos las nueces picadas y los caracoles, y cocinamos todo junto 5 minutos más con el fuego al mínimo.
Con qué acompañar los caracoles a la montañesa
El mejor acompañamiento para este plato tradicional es un pan rústico o de hogaza, perfecto para mojar en la salsa. Y de beber, nada mejor que un buen vino tinto.
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