Hoy vamos a preparar un delicioso aperitivo con toque oriental, con el que podemos alegrar a la familia. Se trata de la receta de alitas de pollo fritas a la vietnamita, que simplemente son las mejores alitas que vas a probar.
Desde que las hicimos por primera vez, tras verlas en The Spruce Eats hemos repetido esta receta cuatro o cinco veces, sirviéndolas en aperitivos, poniéndolas en el centro de la mesa cuando nos reunimos para ver los JJOO o cualquier otro acontecimiento deportivo, ya que resultan excelentes para compartir en familia y con amigos.
Aunque me gustan mucho todas las recetas de alitas de pollo, el sabor especiado con notas de la cocina asiática y ligero picante que tiene esta receta, ha conseguido enamorarme y sin duda es la receta de alitas que más hago en casa en los últimos tiempos. Por algo será.
Secamos las alitas de pollo con un trozo de papel. Cortamos por las articulaciones para que cada ala se convierta en tres piezas. Guardamos o congelamos las puntas de las alas para hacer caldos, ya que no nos gusta desperdiciar alimentos que se pueden utilizar. Con las otras dos partes, haremos esta receta.
Preparamos la marinada usando un mortero o un procesador de alimentos, donde ponemos los tallos de limoncillo o citronella, el diente de ajo, los chiles y el jengibre, trabajando hasta obtener una pasta. Mezclamos esa pasta con la salsa de pescado, el jugo de limón y el azúcar.
Colocamos las porciones de pollo en un plato hondo y cubrimos con la marinada mezclando bien, y dejamos que la carne absorba los sabores durante aproximadamente media hora. Calentamos un wok o un cazo y ponemos abundante aceite de girasol -más o menos dos o tres cm sobre el fondo-. Ponemos el aceite a calentar.
Escurrimos las alitas de pollo y las enharinamos ligeramente. Podemos hacerlo poniendo la harina en una bolsa de plástico con cierre hermético, metiendo las alitas y agitando la bolsa, mientras el aceite empieza a humear. Cuando el aceite esté caliente a unos 180ºC, freímos el pollo en tandas. Cocinamos las piezas más gruesas durante cuatro minutos por un lado y tres por el otro y las más planas dos minutos por cada lado. Las sacamos del fuego y las escurrimos en un colador para terminar en un papel absorbente.
Ponemos una salsa tipo agridulce o sweet chili en un cuenco pequeño y colocamos los trozos de alitas de pollo alrededor, separando los dos tipos de tajadas, y dejando cada clase en un lado. Llevamos a la mesa inmediatamente para disfrutar de las alitas mientras estén aún muy calientes.
Con qué acompañar las alitas de pollo frito a la vietnamita
Para acompañar las alitas de pollo frito a la vietnamita, tenemos muchas opciones. Podemos podemos preparar unos clásicos rollitos de pasta de arroz como aperitivo y también podemos hacer un poco de arroz basmati o arroz jazmín como guarnición. Una buena ensalada de frutas y tenemos así un menú completo, sano y lleno de sabores.
En Directo al Paladar | La mejor receta de alitas de pollo, con ajo y queso parmesano
En Directo al Paladar | Receta de alitas de pollo con tomate, elaborada con solo tres ingredientes