Este potaje gaditano de garbanzos con tagarninas, es un delicioso e intenso plato de cuchara, que cuando probéis, os va a encantar y sorprender por diferir del clásico potaje de garbanzos. Cuando lo hice, lo probó mi mujer -que repitió y se sirvió dos platos como el de la foto- y me dijo que este plato lo tenemos que hacer más a menudo.
Las tagarninas -también conocidas como cardillos- son una estupenda verdura de temporada que encontramos en el sur de España en los meses fríos del invierno y en la zona centro al principio de la primavera, y con ellas ya hemos hecho otras deliciosas recetas como las tagarninas esparragás gaditanas o el revuelto de cardillos con panceta y huevo, que podéis consultar en los enlaces.
Para seguir disfrutando con este producto, he comprado una buena cantidad en el mercadillo de mi localidad y ya tengo en la despensa cuatro frascos con las tagarninas cocidas y envasadas al vacío, para poder hacer estos platos incluso cuando se termine la temporada y ya no las encuentre frescas.
Dejamos los garbanzos en remojo la noche anterior. Al día siguiente los cocinamos escurridos y cubiertos de agua nueva en la olla exprés u olla rápida durante 30 minutos, metiendo también la carne de magro, una punta de jamón, una cucharada de pimentón y la cabeza de ajos entera. Lo hacemos con la olla cerrada en la posición de máxima presión (dos anillos o similar, según el modelo).
Una vez cocidos los garbanzos, retiramos la cabeza de ajos cocida y la desechamos. Cortamos las tagarninas en trozos pequeños y las incorporamos a la cazuela, junto a los chorizos. Cocemos durante 40 minutos, ahora sin tapar la olla. Retiramos las tagarninas que podamos y las reservamos para poder añadirlas después al finalizar la receta, para que conserven su textura. Agregamos también las patatas, peladas y cortadas en porciones.
En un mortero, majamos dos dientes de ajo con una pizca de sal y otra de comino. Agregamos el majado a las tagarninas reservadas y tras mezclarlo bien, retornamos todo a la cacerola. Cortamos los chorizos en porciones y damos un hervor de cinco minutos al conjunto para que se integren bien los sabores.
Es preferible dejar que el potaje gaditano de tagarninas repose de un día para otro, -como casi todos las elaboraciones con legumbres y otros guisos-, ya que quedan más asentados, pero podéis comeros este delicioso plato de cuchara en el día, si no podéis esperar. Si lo habéis hecho de buena mañana, a la hora de comer basta con recalentarlo para que esté perfecto.
Con qué acompañar el potaje gaditano de garbanzos con tagarninas
Para acompañar el potaje gaditano de garbanzos con tagarninas os recomendamos algo ligero que servir como aperitivo, ya que como casi todos los platos de cuchara basados en las legumbres, es muy completo y saciante. Al servirlo como plato único, os proponemos terminar con un postre como el flan de requesón y fresas y ya tenéis el menú redondo.
En Directo al Paladar | Potaje de berros, la receta tradicional canaria que merece la pena descubrir
En Directo al Paladar | Potaje de vigilia tradicional de Cuaresma y Semana Santa
