Como amante fervorosa el brócoli me encanta combinarlo con casi cualquier ingrediente, y me parece que hace una pareja estupenda con pasta o arroz. Hoy os propongo convertirlo en una salsa que podríamos llamar falso pesto de brócoli, una rica manera de sumar este saludable vegetal a nuestro plato de pasta, en este caso unos bavette.
La textura granulada fina que adquieren el coliflor y el brócoli al triturarlos es perfecta para preparaciones de este tipo. Tienen la ventaja además de que se suaviza mucho su sabor y apariencia, por lo que es un buen método para que los menos aficionados a estas verduras también las incorporen a su dieta. En este caso coceremos el brócoli, pero se puede usar también crudo.
Cortar los ramilletes del brócoli, lavar y escurrir bien. Cocerlos hasta que estén tiernos, mejor al vapor, incluso se pueden hacer en el microondas para ahorrar tiempo. Dejar enfriar un poco. Pelar el diente de ajo y tostar ligeramente los piñones en una sartén sin aceite.
Poner el brócoli cocido en un procesador de alimentos o picadora y triturar. Añadir los piñones, el aceite, la sal, la ralladura de limón, el queso y unas hojitas de albahaca fresca. Dar un golpe de pimienta y triturar todo hasta conseguir una mezcla homogénea.
Cocer la pasta siguiendo las instrucciones del paquete y escurrir reservando parte del agua de cocción. Aligerar la salsa con un poco del agua hasta tener la consistencia deseada. Mezclar con la pasta y servir con queso parmesano rallado al gusto.
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Con qué acompañar el falso pesto de brócoli
La salsa de los bavette con falso pesto de brócoli se puede hacer de sabor más o menos concentrado añadiendo más líquido, queso o aceite, mezclándola con una mayor o menos cantidad de pasta, al gusto. Si tuviéramos demasiada cantidad para el número de comensales se puede guardar en la nevera unos días y utilizarse para acompañar carnes o pescados, o como crema untable sobre pan.