La socorrida merluza y su hermana la pescadilla pueden dar muchísimo de sí en función de las prisas que tengamos y los que seamos en casa. El pescado fresco no tiene rival, pero también unas rodajas que hayamos descongelado nos sacarán de más de un apuro, ya sea para la comida o para una cena sencilla y rica.
Una de las formas más fáciles y rápidas de cocinar este saludable pescado es prescindiendo de fuegos y del horno, usando otro electrodoméstico comodín. Las rodajas de merluza al microondas quedan jugosas y sabrosas, apenas mancharemos utensilios y están listas para comer en menos de diez minutos.
Para dos personas nos apañaremos con un par de buenas rodajas, que sean más bien gruesas o generosas, y así no corremos el riesgo de que se nos puedan resecar. Aunque, para evitar este mal del pescado blanco, la técnica es la clave en esta preparación, cubriendo el pescado con rodajas de tomate, que lo protegerán y le darán mucho sabor al cocerse, dejándonos además la guarnición.
Podemos poner más tomate en la base o usar un limón en rodajas, y añadir hierbas provenzales, perejil fresco o, si nos gusta, cilantro, además de buen aceite de oliva y un toque de pimienta. Si tienes cebolla caramelizada en casa sobrante de algún plato, añádela al fondo de la fuente sin miedo.
Ya solo te queda ajustar los tiempos a tu aparato y el grosor del pescado hasta que lo veas cocido por dentro, y servirlo tal cual, con todos los jugos de la fuente, o añadiendo alguna guarnición extra como arroz blanco. Comida exprés, sana y sabrosa en tiempo récord.
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En DAP | Merluza a la plancha
En DAP | Merluza al horno con verduras
