Más allá de lo tradicional, podes sorprender a tus invitados con esta mermelada de pimiento rojo. Casera y fácil de preparar, en unos 60 minutos aproximadamente podrás tener lista esta deliciosa conserva. Perfecta para regalar o para disfrutar en la mesa.
Las posibilidades de uso son infinitas. Por ejemplo, como salsa para una carne a la parrilla o como ingrediente secreto en los aderezos. Es ideal para acompañar quesos o simplemente untada en una tostada. De manera opcional, se puede añadir otros ingredientes como vinagre balsámico, miel o especias para darle un toque personal a la mermelada.
Lavar y cortar en trozos pequeños el pimiento rojo. Retirar todas las semillas y tiras blancas que hay dentro. Pesar la cantidad de pimientos limpios, ya que la proporción de azúcar dependerá de ello.
En una olla, colocar los trozos del pimiento rojo junto con el agua, el vinagre y el azúcar, y la pizca de canela a fuego medio. Remover para mezclar bien los ingredientes y cocinar por 45 a 50 minutos aproximadamente, debe estar un poco "caldosa". Triturar con ayuda de un robot de cocina unos 2 minutos. Personalmente, me gusta que la mermelada tenga textura por lo cual no la trituro al 100% para que hayan unas piezas enteras del pimiento. De querer una consistencia homogénea, continuar unos minutos más.
Enfriar para que tome consistencia antes de degustar o guardar en un tarro esterilizado.
Con qué acompañar la mermelada de pimiento rojo
Con esta receta, podes añadir un toque especial a tus sándwiches con una capa de mermelada de pimiento rojo. Combina muy bien con carnes frías, quesos y hojas verdes por ejemplo. O mismo a una hamburguesa de garbanzos ayuda a darle un toque agridulce e interesante. Y aunque suene extraño, esta mermelada puede utilizarse como salsa para una porción de bizcocho de yogur casero, para un acabado original.
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