Cantaba Víctor Manuel, cuando se ponía meloso, aquello de Nada sabe tan dulce como su boca, pero la realidad, romanticismo aparte, es que si nos ponemos veraniegos pocos pueden negar que un buen tomate y una buena sandía pueden ser dulces, mucho.
Tanto como para que llevemos todo el año esperando su advenimiento, fundamental para darnos alegrías frescas en la cocina española de verano, que durante meses aguardaba la llegada de las frutas de verano y de algunos de los mejores ejemplares de nuestra huerta.
Y tanto, o más, como para no resistirnos a meter en la misma receta al tomate y a la sandía, una pareja que funciona excepcionalmente bien y que, incluso, el chef José Andrés puso a bailar hace unos cuantos años en su programa Vamos a cocinar, que se emitió en La 1 de TVE.
No es la primera vez que sandía y tomate salen a la pista. De hecho, en DAP tenemos algunas recetas que ya han demostrado que se combinan perfectamente bien, pero cuando hemos visto esta sugerencia de la hemeroteca del chef José Andrés hemos creído necesario traerla.
No solo porque la haga José Andrés, sino porque nos permite jugar con contrapuntos dulces, ácidos y salados con el tomate y la sandía, saliendo también de los terrenos del postre o de las ensaladas, creando esta singular tapa de tomate y sandía.
Misterio, si creéis que tiene, no va a aparecer ninguno, pero éxito tiene todo el del mundo –la receta, no José Andrés, que también– y solo consiste en tener buen ojo a la hora de elegir tomates y sandías en nuestros mercados.
Lo que sugiere aquí el chef de origen asturiano, aunque criado en Cataluña, es hacer una sencilla tapa de tomate y sandía que podemos replicar con mucha facilidad en nuestros hogares.
El secreto es, simplemente, cortar pequeñas piezas de bocado de nuestra sandía, a modo de cubitos. Lo justo para que no sean ni muy grandes ni muy pequeños. Sin embargo, con el tomate se hace la magia. El chef deja primero una pincelada de cómo saber cuántas paredes interiores tiene un tomate, fijándose en la base de éste, y una vez hecho este pequeño gesto, corta el tomate.
Primero corta la base y luego corta la punta, dejando el tomate asentado sobre la tabla y ya pudiendo sacar lo, a su juicio, "más preciado del mundo de los vegetales". En este caso se refiere a las semillas del tomate, que retira con un cuchillo con mucho cuidado y lo coloca despacio sobre los tacos de sandía.
Sobre eso, añade un poco de sal, una pizca de aceite de oliva virgen extra y una hojita de albahaca, combinando así varios sabores que empastan de maravilla y que nos permiten tener una tapa impresionante a base de tomate y sandía.
Imágenes | Instagram Chef José Andrés