Seguro que muchos de los lectores de Directo al Paladar, han podido disfrutar de unos días de vacaciones, aprovechando el primero de mayo, y si como yo, sois de Madrid, habréis podido juntar un largo puente. Además, en buena parte de la península el tiempo ha acompañado, así que... vacaciones + buen tiempo = barbacoa.
Hace tiempo que en DAP publicamos algunos consejos para cocinar barbacoa. Pero no hay que olvidar que una buena barbacoa, empieza por un buen fuego. Sin ello, poco se puede hacer, y dominar el fuego de una barbacoa no es fácil. Hoy os quiero compartir algunos trucos, para situaciones complicadas, con el que podréis dominar el fuego de la barbacoa.
Una buena barbacoa se basa en las brasas. La llama tiene que desaparecer casi por completo, y lograr una buena brasa es clave. Sobre todo es importante lograr que el calor se reparta de forma uniforme por toda la superficie que vamos a utilizar para cocinar. Lo mejor, como ya sabréis casi todos, es usar carbón. Bien vegetal, o bien mineral. Ahí yo no tengo preferencia alguna. Y para que el carbón prenda, se puede utilizar antes leña.
Si nos hemos preparado bien, lo normal es que tengamos pastillas para barbacoas, o bien leña bien seca junto con algo de papel. Ahí no hay mucho misterio. Haces un montón de papel, pones una pastilla, leña y/o carbón, y ya tendrás las brasas listas. Pero no siempre tendremos tantos recursos. ¿Qué hacer en estos casos? Ahí es donde entran en juego los siguientes trucos.
Aceite, Sal y Patatas fritas
Es muy poco probable que no tengáis aceite o sal si vais a hacer una barbacoa. Y si no los tenéis, pues lo mejor es que os vayáis a un restaurante, y os quitéis de problemas.
¿Qué hacer con el aceite? Pues rociar ligeramente esos troncos verdes que no terminan de prender, o esa madera grande que no termina de calentarse del todo. Veréis el efecto. El aceite actúa como acelerante, y lo que antes no prendía de ninguna forma, ahora ya es otra cosa. Eso sí, cuidado de no pasarse.
Otra cosa que se puede usar como acelerante son las patatas fritas. Sí, has leído bien, patatas fritas. De esas de bolsa. Arden muy bien, y un montoncito de patatas, nos puede hacer las veces de una pastilla en situaciones límite. Probadlo, no es broma. A falta de una buena piña claro. La piña es insuperable, y rociada en aceite más.
Otro problema recurrente con las barbacoas, es que tengamos demasiada llama, que el personal esté ya con hambre, y que nos empiecen a meter presión para ver cuándo están listas las brasas. Aquí el truco consiste que rebajar las llamas con sal. También puede pasar que al hacer carnes grasas, principalmente panceta, ésta suelte grasa que al quemarse provoque llama. En este caso, también es útil echar sal directamente sobre las brasas para matar la llama. Por cierto, la sal siempre al final, para evitar que los alimentos "suden" y el agua, baje demasiado la temperatura. Recordad, la idea es que se produzcan reacciones químicas básicas de la cocina. Principalmente la de Maillard, y para eso hace falta calor (como la canción).
Hierbas aromáticas y verduras asadas
Es básico untar las verduras en aceite de oliva, si queremos que queden bien. De otro modo quedarán muy secas, poco sabrosas, y tardarán mucho en hacerse. Lo mejor es poner un bol o cuenco o plato hondo con aceite, y pasar las verduras por ahí. Lo mismo puede hacerse con las brochetas de carne o verdura. El aceite, al calentarse, facilitará y dará sabor la cocción a la barbacoa.
El toque TOP en una barbacoa, puede ser este. Quemar, junto con las brasas, y justo al poner los alimentos, hierbas aromáticas como tomillo, albahaca, romero, laurel, etc... que aromatizarán todo, y harán que tengan un sabor muy especial.
Estos son algunos trucos para dominar el fuego de la barbacoa, ¿y vosotros? ¿Qué otros trucos tenéis?
Imágenes | Por Guadalupe Cervilla ,Por En Directo al paladar | Pizza barbacoa. Receta En Directo al paladar | El arte de la barbacoa