Un año más estamos a las puertas de la celebración de los Premios Óscar , que este domingo celebrarán ya su 90º edición. Un evento que se podrá criticar de muchas maneras, pero que para muchos es una de las citas imprescindibles del año. Lo que sin duda será otro espectáculo es la gran cena de gala tradicional que se servirá en el Governors Ball, un desfile sin fin de mini platos al gusto de todas las estrellas.
De nuevo el encargado de dar forma al pantagruélico menú es el austriaco Wolfgang Puck, quien cumplirá ya 24 años encargándose de la celebración oficial de la Academia tras la gala. Pero esta vez la fiesta será aún más a lo grande, pues se quiere conmemorar el aniversario de los Premios con un evento que homenajeará a los casi cien años de historia del cine con todo un despliegue de medios.
Un menú de 71 tentaciones de lujo
En total se servirán 39 platos salados y 29 postres, más tres elecciones especiales bajo pedido, todos creación exclusiva de Puck y su equipo, más otros chefs y pasteleros que unirán sus fuerzas en el evento. Nada más y nada menos que 71 recetas distintas y únicas, divididas en diferentes apartados, al estilo habitual de los eventos del cocinero austriaco. Vuelven algunos de sus platos más celebrados y se nota la tendencia a incluir platos más saludables y opciones vegetarianas o sin gluten.
- Amuse Bouche. Los pequeños bocados para ir abriendo el apetito con picoteos clásicos de los eventos como palitos crujientes de parmesano, quesos y fruta y frutos secos.
- Passed Hors d’Oeuvre. Aperitivos o entrantes que incluyen tanto versiones gourmet de platos tan queridos como la pizza, así como recetas más sofisticadas, como la “explosión de ruibarbo con sabores thai” o el lujoso tartar de Wagyu con arroz negro inflado y togarashi, elaborado con carne de buey exclusivo de JA Miyazaki.
- Small Plates. Los platos principales en formato pequeño que incluyen un poco de todo, desde sopa de espárrago blanco con caviar hasta ravioli relleno de trufa, pastel de pollo o varios platos vegetarianos.
- Raw Bar. Ya un imprescindible, la barra de elaboraciones crudas está dedicada a los amantes del sushi, de las ostras y de otras preparaciones frescas esencialmente marineras.
- Pastries & Chocolate. La larguísima selección de dulces tiene creaciones muy originales como los macarons inspirados en cócteles clásicos, y otras tentaciones más tradicionales pero siempre con el toque glamuroso de las estrellas, como el brownie de chocolate negro o el cupcake de zanahoria vegano.
- Vegan Items (sin gluten). Sin duda habrá invitados que sigan dietas veganas y sin gluten, y sería terrible dejarlos sin postre. Un sándwich de galletas, cupcakes de coco y galletas de nueces y chocolate saldrán a su rescate.
- Passed Small Desserts. Cuando la noche se alarga puede apetecer recargar las energías con más dulce, en este caso pequeñas delicias de diseño exclusivo. Destaca el Ruby Chocolate Strawberry and Cream, elaborado con el novedoso chocolate rosa, la primera vez que se utiliza en un catering en Estados Unidos.
- Made to Order. ¿Se han quedado con hambre? No hay problema, las estrellas siempre pueden pedir una tarta de crêpes con relleno de chocolate y frambuesas, ricos beignets con caramelo o una digestiva bebida de kombucha con hibisco.
Maridaje con vinos exclusivos de Francis Ford Coppola
Hace tiempo que Francis Ford Coppola puso en marcha su propia bodega para materializar otra de sus grandes pasiones, la cultura vinícola. Para unirse a la celebración y conmemorar esos 90 años de Premios, la Francis Ford Coppola Winery ha lanzado dos vinos de edición limitada que se servirán exclusivamente en la fiesta; los Oscars 90th Edition incluyen un Chardonnay 2016 y un Cabernet Sauvignon 2015.
Además de estas dos ediciones únicas, que teóricamente reflejan la propia tradición y personalidad de los Óscar, durante la cena se servirán otros vinos clásicos de la firma familiar. En total serán 2,400 botellas de vino, más de 14,000 copas llenas por gentileza de la bodega del mítico cineasta.
Pero también han querido ofrecer algo al consumidor ajeno al mundillo de Hollywood con una botella de edición limitada que homenajea la temporada de premios, el Director's Final Cut 2014. Se trata de un vino tino elaborado exclusivamente con uva Malbec que incluye una etiqueta interactiva que replica el efecto de la animación del zootropo. Un buen objeto de deseo para coleccionistas.
La fiesta gastronómica del cine, en cifras
Si ya me agobio al pensar en cómo se las arreglan los profesionales para sacar adelante una boda corriente, soy incapaz de imaginar el enorme trabajo de coordinación que habrá detrás de la cena de los Óscar. Algunas de las cifras que se manejan para la ocasión hablan por sí solas:
- 1,500 invitados
- 10 maitres
- 850 empleados de servicio
- 300 miembros del equipo de cocina
- 13,000 vasos para bebidas
- 4,800 platos pequeños
- 4,500 ramekins y vasitos
- 6,000 tenedores de cóctel
- 1,500 huevos de codorniz
- 7,500 gambas americanas
- 250 langostas de Maine
- 136 kilos de carnde de Wagyu Miyazaki
- 147 kilos de arroz de sushi
- 158 kilos de atún
- 15 kilos de caviar americano
- 113 litros de salsa cóctel
- 113 kilos de queso Parmesano
- 453 kilos de pollo
- 400 mini pizzas artesanas
- 4,500 piezas de ravioli “agnolotti” artesanos
- 350 floretes de coliflor
- 90 kilos de coles de bruselas
- 3,600 huevos de gallinas camperas
- 2,000 galletas variadas
- 30 kilos de chocolate Callebaut Ruby
- 1 tonelada de chocolate Fleur de Cacao Barry 70%
- 1000 bombones artesanos
- 2,550 macarons
- 13 kilos de polvo de oro
- 7,000 mini Óscares de chocolate
- más de 5,000 cócteles
- más de 1300 kilos de cubitos de hielo tallados a mano
Una celebración digna de las estrellas
El lujo de la comida y la bebida estará bien acompañado del propio escenario. Por primera vez se contará con el trabajo de una profesional del cine para el montaje de la sala, Louis Burwell, especialista en maquillaje y ganadora del Óscar por su trabajo en Braveheart. La artista ha diseñado con el equipo de Sequoia Productions toda la decoración y ambientación del evento, que será un homenaje a la historia de los Premios y a la propia industria del cine.
Se quiere recrear la gloria pasada de otras épocas, especialmente la visión ingenua y artesana que se tenía del cine cuando los Óscar eran poco más que una fiesta de amigos apasionados por su profesión. En el salón habrá objetos históricos y recreaciones, así como proyecciones y juegos cinemáticos con imágenes y música de diferentes películas. Sin olvidar la presencia de la icónica figura del propio Premio Óscar, por supuesto.
A mí me encantaría ver el espectáculo de la cena y también de su montaje entre bastidores, pues un evento de esta magnitud y lujo debe ser digno de admirar. Tampoco hay que olvidar que es solo una de las fiestas que se celebran en Hollywood después de la gala, y de hecho los hermanos Roca servirán otro menú muy especial en la cena de la Fundación Elton John.
En cualquier caso, mientras las estrellas se llenan el estómago con tantas delicias nosotros estaremos ya afrontando una nueva jornada de lunes. Los que aguantemos toda la emisión de la ceremonia siempre podemos montar nuestra propia cena -y recena- de cine en casa, y que no falten las palomitas.
Fotos | Oscars - John Salangsang - Richard Harbaugh - Matt Petit - ©A.M.P.A.S.
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