Seguro que has oído hablar de ellas, pero quizás no has tenido la ocasión de probarlas. La salchipapa es una de las recetas de comida callejera más populares de países como Perú, Colombia y Ecuador. Como no queremos que te quedes sin probarlas, hoy te contamos cómo hacerlas en casa.
A nosotros nos gusta la fórmula básica, patatas y salchichas fritas aderezadas con una trilogía de salsas que combinan muy bien entre sí: mostaza, mayonesa y kétchup. No obstante hay quien la enriquece con otros toppings como beicon crujiente, cebolla frita, queso, etc. Al gusto de cada cual.
Pelamos las patatas y las cortamos en bastones de 1 cm de grosor. Calentamos abundante aceite de oliva (o vegetal) en una sartén y las pochamos (confitamos) a fuego suave durante 15 minutos. Mientras tanto cortamos las salchichas al bies.
Cuando las patatas estén tiernas, añadimos las salchichas a la sartén y subimos el fuego al máximo. Con ello las patatas quedarán crujientes por fuera y cremosas en su interior.
Retiramos las patatas y las salchichas, separándolas en la medida de lo posible, a un plato con papel absorbente, para retirar el exceso de grasa. Sazonamos las patatas y las pasamos a una fuente de servir, colocando las salchichas encima. Decoramos con las tres salsas, mostaza, mayonesa y ketchup, y servimos inmediatamente.
Con qué acompañar la salchipapa
Una fuente de salchipapa, con sus tres salsas -mejor si sin caseras-, es perfecta para compartir. Ya sea a la hora del aperitivo o como cena informal. El mejor acompañamiento es aquel con quien disfrutarlas: familiares, amigos, parejas...Tú decides.
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