Si la gastronomía es un arte o no, está siendo discutido constantemente, unos dicen que es arte, otros que es oficio y otros no se pronuncian al respecto. Aunque no voy a entrar en discusiones sobre este tema, para no darle ni quitarle razones a nadie diré que, la cocina es mitad oficio o sabiduría y mitad arte, de esta manera quedo bien con todos o mal con todos, que nunca se sabe.
Pero lo que no admite mucha discusión es que hay obras de arte que, son reconocidas a nivel mundial transcendiendo en el tiempo, sirviendo de inspiración y haciéndose adaptaciones de ellas de muchas maneras distintas.
Esto es lo que ha pasado con la famosa obra "El Grito" del noruego Edvard Munch. Ahora, y gracias a una bandeja de cubitos de hielo, podremos tener flotando en nuestra bebida la parte más reconocible de este cuadro, la cara gritando.
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