Alta cocina con tintes regionales, sabores de siempre reinterpretados en los fogones de la nueva cocina y el protagonismo del otoño, con sus setas, su caza y sus sabores de monte, son los protagonistas de las I Jornadas Gastronómicas de la Red de Hospederías de Castilla-La Mancha.
Turismo de interior de calidad, relax, ciudades históricas y buena mesa se convierten así en los imanes con los que Castilla-La Mancha atrapa al viajero, rememorando durante el otoño lo más notable del recetario manchego, poniendo toques estelares (incluso con sello Michelin) a un camino que habría encandilado al mismísimo Don Quijote.
Fogones representados en esta ruta que hace de las papilas gustativas las guías de este recorrido. Una semana condensada de sabores entre el 23 de octubre y el 1 de noviembre donde disfrutar en cinco establecimientos castellano-manchegos de menús únicos, que ponen en valor la cocina de la región.
Una riqueza variada, que concibe Castilla-La Mancha como un conjunto de singularidades donde lo monumental, lo histórico y lo culinario se conciben en un mismo espacio, compartiendo valores comunes, que llevan al comensal por algunos de los establecimientos más especiales y con más encanto de toda la comunidad.
Planes que combinan lo rural con lo urbano, donde podemos descubrir el hotel y restaurante Molino de Alcuneza (con estrella Michelin) en Sigüenza, en el corazón de Guadalajara, o conocer en profundidad la meseta manchega como en la Hospedería Santa Elena (en San Carlos del Valle, Ciudad Real) o el encanto del Hotel Palacio del Infante Don Juan Manuel, en el pequeño pueblo de Belmonte, en plena ruta del Quijote.
Un contraste que llama al viajero desde el Hotel Boutique Adolfo, en pleno centro de Toledo, o el Hotel Convento del Giraldo, una joya en la zona antigua de Cuenca, cuyas vistas se despliegan sobre las hoces del Huécar, ofreciendo una magnífica panorámica de la ciudad.
Magnetismo y cercanía que se trasladan a la cocina de cada una de estas hospederías en las que tras cruzar la puerta uno se siente como en casa y donde el otoño impregna de calor y aroma cada bocado. Es tiempo de que la caza hable -perdiz, torcaces, codornices, ciervos...- pero también de darse un gustazo a base de setas -trufas, colmenillas, boletus, níscalos...- y de comprobar cómo han evolucionado platos tan tradicionales como el pisto, el morteruelo, el atascaburras o los gazpachos manchegos, perfectas parejas de baile de los vinos locales, en continua boga desde hace unos años.
Disponibles desde el 23 de octubre al 1 de noviembre, la Red de Hospederías de Castilla-La Mancha junta así tradición, pasión, sabor y hospitalidad en algunos de sus locales más emblemáticos por precios muy asequibles con una cocina regional puesta al día. Ingredientes humildes y reivindicados, cargados de herencia, que forman parte de un plan perfecto para compartir en pareja o en familia y que hace que nuestra alma quijotesca tenga más ganas que nunca de volver a Castilla-La Mancha.
Molino de Alcuneza. Menú 79€. Carretera Alboreca, km. 0.5, Alcuneza, Guadalajara.
Hotel Boutique Adolfo. Menú 49€. Plaza Zocodover, 14, Toledo.
Palacio Infante Don Juan Manuel Hotel Spa. Menú 45€. Calle Infante Don Juan Manuel 2, Belmonte, Cuenca.
Hospedería Santa Elena. Menú 30€. Plaza Mayor, s/n, San Carlos del Valle, Ciudad Real.
Hotel Convento del Giraldo. Menú 30€. Calle San Pedro, 12, Cuenca.
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