Supongo que también habrá debates encendidos entre los defensores y detractores del melón con jamón, ese clásico que soluciona tantos primeros platos en menús del día a lo largo y ancho de España. Sinceramente creo que la mezcla gana más con melón cantalupo, al estilo francés, pero yo reivindico a la otra gran fruta del verano para dar un salto en la combinación original.
La receta de milhojas de sandía, mozzarella y jamón es tan simple como sorprendente, pues la presentación siempre llama la atención y su sabor también se gana el favor de los que la prueban. Con más chicha que el típico plato en el que se inspira, aquí incluimos la mozzarella como queso fresco y suave que combina de maravilla con la sandía, y enriquece mucho más la receta.
Añadiendo en las capas también unas hojas de lechuga tipo batavia o de hoja de roble logramos en realidad presentar una ensalada con un emplatado más divertido, un pequeño juego de los que apetecen más en las mesas de verano y que gustará mucho a los más pequeños si tenemos niños en casa.
No hace falta usar un jamón ibérico de primera calidad para hacer esta receta, pero allá cada cual con su presupuesto y gusto. En alguna ocasión hemos recurrido a fiambre de pavo o de jamón cocido bueno y sale también muy rica, una buena idea para las cenas más calurosas de verano.
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