La contaminación atmosférica es uno de los principales problemas a los que se enfrentan las grandes ciudades. A pesar de las normativas, mediciones y medidas aplicadas, los niveles de contaminación que alcanzan muchos núcleos están lejos de ser los recomendados debido a la polución que se produce diariamente. Y ahora empiezan a surgir otras voces de alarma, y es que la contaminación del aire en nuestras cocinas podría ser incluso superior al de la calle.
Según un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Sheffield, en Reino Unido, las cocinas de muchos hogares podrían ocultar niveles de contaminación equivalentes al de una calle de ciudad, pudiendo llegar a triplicar las cifras de componentes contaminantes. Las cocinas más peligrosas en este sentido serían las más tradicionales, aquellas que funcionan con gas.
El estudio se planteó para determinar si el aire interior de los hogares británicos podría alcanzar cifras contaminantes equivalentes a las de un núcleo urbano desarrollado. Los investigadores partieron de la idea de los esfuerzos que se hacen hoy en día por cerrar nuestras viviendas del exterior, con la esperanza de mantenerlas aisladas de la atmósfera y el clima. Pero esto puede causar un efecto contrario al deseado.
Se tomaron muestras de tres tipos de residencias con diferentes sistemas de energía: una casa rural con cocina eléctrica, un piso en centro urbano con cocina de gas y otro apartamento en una calle central también con gas. Tras comparar los resultados, se concluyó que el aire en un hogar con cocina de gas puede contener hasta tres veces más agentes contaminantes que el exterior, como dióxido de nitrógeno y dióxido de carbono.
Teniendo en cuenta que pasamos gran parte de nuestro tiempo dentro de nuestras casas aislados del exterior, especialmente en los meses fríos, son cifras preocupantes. Aunque no podemos extrapolar directamente los resultados a nuestro país, es un tema sin duda interesante ya que somos muchos los que sufrimos algún tipo de problema respiratorio. Miramos con recelo la contaminación de la ciudad pero podríamos estar conviviendo en una atmósfera igualmente peligrosa, sin saberlo.
Vía | Eurekalert Fotos | Ndecam, sunshinecity Más información | Sage Journals En Directo al Paladar | Para evitar la contaminación en nuestras cocinas...
