Qué a gusto se está durante el fin de semana ¿verdad? Eso de tener dos días libres por delante para hacer lo que nos plazca es un auténtico placer. Poder ofrecer un picoteo a amigos o familiares es maravilloso, sobre todo si contamos con recetas que se montan en menos de 30 minutos porque, aunque contemos con tiempo para la cocina, todos nos merecemos un descanso.
Entre estas siete recetas listas en menos de 30 minutos las hay de cuchara, de comer con los dedos, en vasito, de horno, vegetarianas, de carne y de pescado. El equilibrio está servido, por si decidís hacerlas todas. Si no, simplemente escoged la que más os guste y disfrutad del picoteo del finde a tope.
Ajoblanco de remolacha
Este ajoblanco de remolacha es una versión del gran clásico de la gastronomía española. Es una receta fácil, rápida y sabrosa que podemos preparar con antelación y guardar en la nevera hasta el momento de servir. Recomendamos servirlo con unas gotas de aceite de oliva virgen extra, unos dados de queso feta y unas hojas de menta como decoración.
Ingredientes para cuatro raciones: 200 g de almendra pelada, 200 g de remolacha cocida, 1 diente de ajo, 3 cucharadas de vinagre de vino tinto, 1 cucharadita de azúcar, 425-450 ml de agua, 5-6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra, queso feta (opcional) y menta fresca (opcional).
Elaboración: En un robot de cocina potente colocamos las almendras con medio vaso de agua y las trituramos finamente. Pelamos el diente de ajo y retiramos el germen de su interior. Lo agregamos a la almendra triturada junto con la remolacha cocida, el vinagre de vino tinto y el azúcar. Trituramos de nuevo hasta obtener una pasta homogénea. A continuación agregamos el resto del agua, primero la mitad y trituramos. Seguimos añadiendo y triturando hasta obtener el espesor deseado. Por último, sazonamos y agregamos el aceite de oliva virgen extra. Trituramos a máxima potencia durante cinco minutos para emulsionar la sopa.
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Banderillas de salchichas
El picoteo del aperitivo es parte del bagaje cultural que encontramos en la cultura española. Es un momento de convivencia que bien merece un bocado tan sabroso como estas banderillas de salchichas. Crujientes por fuera y tiernas por dentro, mejor si las servimos tibias y con la salsa que más nos guste para mojar.
Ingredientes para cuatro unidades: 2 salchichas para hotdog, 4 rebanadas de pan integral, 4 lonchas de queso de sándwich, 1 huevo, 200 g de pan rallado, 4 palillos de madera para brocheta, sal y aceite vegetal.
Elaboración: Hervimos las salchichas en una olla con agua salada durante unos ocho minutos. Las retiramos de la misma y las cortamos en dos. Con la ayuda de un rodillo aplanamos las rebanadas de pan de tal manera que queden muy compactadas. Colocamos una loncha de queso sobre cada rebanada de pan y, sobre ellas, las medias salchichas. Enrollamos para formar un cilindro. Batimos el huevo en un cuenco y pasamos cada cilindro por el mismo y luego por el pan rallado. Freímos en abundante aceite, volteando para que doren bien por todos lados. Colocamos un palillo de madera en cada cilindro y servimos.
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Costillas de cerdo al curry
Seguro que estáis pensando que nos hemos equivocado y que es imposible hacer costillas de cerdo en menos de 30 minutos, pero no. No es el caso. Os lo demostramos con nuestra tercera propuesta para el picoteo del finde. Es necesario contar con una olla a presión, eso sí, y en poquísimos minutos tendremos unas deliciosas costillas de cerdo al curry delante de nuestros ojos. Para chuparse los dedos, literalmente.
Ingredientes para dos raciones: 1 costillar de cerdo (700 g), 50 ml de aceite, 50 g de miel, 2 cucharadas de curry, 1 limón, sal y pimienta
Elaboración: Empezamos separando las costillas del costillar. Luego salpimentamos las costillas y las doramos en la olla exprés con un poco de aceite. Preparamos la salsa mezclando el aceite, la miel, el curry y el zumo de limón. Cuando las costillas se hayan dorado, incorporamos la salsa de curry, añadimos un chorrito de agua (unos 50 ml), removemos bien y cerramos la olla a máxima potencia. Desde que empiece a silbar y bajemos el fuego, contamos cinco minutos y ya tenemos listas nuestras costillas.
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Vasitos de crema de queso manchego con tapenade y tomates cherry
Los vasitos son un formato que le va como anillo al dedo al picoteo del finde. Las porciones son fáciles de hacer, cada comensal coge el suyo y nadie se queda sin probarlo. Estos vasitos de crema de queso manchego con tapenade y tomates cherry se pueden servir a distintas temperaturas, así que, si nos pilla el toro y los preparamos en el último momento, los vamos a disfrutar igual y nadie lo notará.
Ingredientes para cuatro raciones: 120 g de queso manchego curado, 240 g de nata al 35%MG, 4 tomates cherry, 40 g de tapenade de aceituna negra, 4 hojas de albahaca fresca, pimienta negra y 2 cucharaditas de aceite de oliva virgen extra.
Elaboración: Comenzaremos rallando el queso manchego. En un cacito al fuego calentamos la nata y la pimienta, añadimos el queso rallado y cocinamos durante tres minutos a fuego medio sin dejar de remover. Repartimos la mezcla en vasos de chupito y reservamos. En otro cazo ponemos un poco de agua a hervir, y le hacemos con un cuchillo afilado una pequeña cruz en la base de cada tomate. Cuando el agua borbotee escaldamos unos segundos los tomates cherry, los pelamos y los colocamos encima de la crema de queso. Colocamos encima de cada tomate, una cucharadita de tapenade de aceitunas negras, coronamos con una hoja de albahaca y regamos cada vasito con la mitad de una cucharilla de aceite de oliva virgen extra.
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Coliflor con cúrcuma
Esta es una receta vegetariana que resulta muy sabrosa, además de ser muy fácil y rápida de preparar. Se puede tomar fría, lo que permite hacerla con antelación y llegar al momento del picoteo sin precipitaciones. Admite variaciones y la coliflor puede aliñarse con otros ingredientes como, por ejemplo, hierbas aromáticas o lo que vuestra imaginación os sugiera. No hay límites.
Ingredientes para cuatro o seis raciones: 1/2 coliflor, sal, 1 cucharadita de pimentón, pimienta negra recién molida, 1 cucharada bien llena de cúrcuma, 1 pizca de cayena, 1 cucharadita de azúcar, 4 o 5 cucharadas de aceite de oliva virgen extra y 1 diente de ajo.
Elaboración: Precalentamos el horno a 180º. Pelamos y picamos el diente de ajo. Lavamos y secamos la coliflor y la separamos en pequeños racimos. En un bol grande mezclamos el resto de ingredientes, removiendo con una cuchara para que se unan. Incorporamos la coliflor y removemos para que se impregne bien. La colocamos en una bandeja de horno y dejamos que se haga al horno durante unos 20 minutos.
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Flatbread o pan plano crujiente de patata, Gruyère y crema agria
Las recetas de masas saladas son una gran solución para esos momentos en los que no estamos especialmente creativos en la cocina. Esta receta de flatbread o pan plano crujiente de patata, Gruyère y crema agria nos gusta por su sencillez, porque no requiere levado y porque combina con muchos ingredientes, aunque la combinación que os presentamos es de matrícula de honor.
Ingredientes para una ración grande o dos pequeñas: Para la masa: 125 g de harina de trigo de repostería, 15 ml de aceite de oliva virgen extra, 60-65 ml de agua, orégano, ajo granulado, sal y pimienta negra. Para el relleno: 4 cucharadas de crema agria o Schmand, 1 patata mediana, 50-70 g de queso Gruyère, tomillo seco, pimienta negra y sal.
Elaboración: Precalentamos el horno a 220ºC y preparamos una bandeja adecuada. Disponemos en un recipiente la harina con el aceite y orégano y ajo granulado al gusto. Salpimentamos y echamos 60 ml de agua. Empezamos a mezclar, añadiendo algo más de líquido si hiciera falta. Amasamos y formamos una bola ligeramente húmeda, pero no pegajosa. Tapamos y dejamos reposar 5 minutos. Lavamos la patata y cortamos en rodajas muy, muy finas, con un cuchillo muy afilado o usando una mandolina. Estiramos la masa muy fina dándole forma ovalada y colocamos en la bandeja de hornear. Cubrimos con la crema agria y repartimos encima la patata. Salpimentamos y espolvoreamos con el queso rallado y el tomillo (al gusto) y horneamos durante 15 minutos.
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Zamburiñas picantinas con salsa de tomate y jengibre
Nuestra última propuesta es la más lujosa y, si tenemos la suerte de encontrar zamburiñas a buen precio, bien merece la pena hacernos con unas cuantas para darnos un capricho. Es una receta muy fácil en la que las zamburiñas se cuecen en la salsa que, si nos gusta sin tropezones, podemos triturar antes de incorporarlas a ella. Podemos hacerlas más sabrosas (si cabe) espolvoreando perejil o cilantro picados por encima en el momento de servir.
Ingredientes para tres raciones: 12 zamburiñas, 300 ml de tomate triturado, 1 puerro, 1 diente de ajo, 1 trocito de guindilla, 1 trozo de jengibre de 1,5 cm, perejil picado Cómo hacer zamburiñas picantitas con salsa de tomate y jengibre
Elaboración: Comenzamos por la salsa, picando muy fino el ajo y el puerro y lo ponemos a pochar a fuego lento. Tras unos quince minutos añadimos el tomate triturado y dejamos cocer 12 minutos más. Pelamos el jengibre y lo picamos muy finamente. Lo añadimos a la salsa de tomate y puerro y dejamos que se cocine otros cinco minutos. Probamos y rectificamos de sal. Ponemos las zamburiñas sobre la salsa formando varias capas y dejamos que se cocinen dentro de ella durante unos tres o cuatro minutos.
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