Hoy vamos a cenar en casa un apetitoso suflé de verduras con queso sin lactosa. Es un plato al que normalmente no le presto demasiada atención, y cuando preparo un suflé suelen ser dulces, pero las posibilidades de combinar con lácteos e ingredientes de origen vegetal son enormes, y es esto precisamente lo que más me gusta. Si conocéis el suflé de chocolate, de limón o de manzana, es hora de que probéis otros sabores, seguro que no nos arrepentiréis.
Por otra parte seguro que recordaréis nuestros consejos para preparar el organismo de cara a la nueva estación, eso unido a que ya apetece mucho probar nuevos platos calientes (me siento ya en otoño aunque el clima no acompaña), me ha llevado a utilizar dos verduras muy típicas de esta estación.
Ingredientes para cuatro personas:
50 gramos de harina, 8 claras de huevo, 4 yemas de huevo, 60 mililitros de aceite de oliva, medio litro de leche semidesnatada sin lactosa Kaiku, un sobre de queso emmental sin lactosa Kaiku, una coliflor y un brócoli (ambos pequeños), sal, pimienta y nuez moscada.
Necesitaremos cuatro recipientes para suflé pequeños, o dos grandes como los que he usado yo (tienen 12 centímetros de diámetro). Para engrasarlos se deben untar con un poco de aceite de oliva y se espolvorean con pan rallado.
Cómo hacer el suflé de coliflor y brócoli con queso sin lactosa:
Primero ponemos el aceite a fuego lento y añadimos poco a poco la harina, removiendo sin cesar para evitar que se formen grumos. Cuando la salsa esté ligada, añadimos la leche muy despacio, y seguimos agitando la mezcla, lo dejaremos calentar justo hasta el primer hervor, en este momento apagamos el fuego y aderezamos con sal, pimienta y nuez moscada (a gusto de cada uno).
Es el momento de lavar cuidadosamente el brócoli y la coliflor, tras lo cual los herviremos en abundante agua con un poco de sal. Cuando estén tiernos los pasamos por agua fría y dejamos escurrir quitando el tronco para separar las ramas. Reservamos las del brócoli, y aplastamos con un tenedor la coliflor.
Mientras las verduras se cuecen mezclamos medio paquete de queso con la salsa de harina y removemos un poco más, después batimos las yemas con el resto del queso, y lo incorporamos todo a la mezcla anterior. Cuando la coliflor esté triturada la vamos a añadir también a la base de nuestros suflés.
Ahora sólo nos quedan los últimos pasos: tenemos que pre calentar el horno a 170 º, y engrasar los moldes. El último punto de la preparación antes de la cocción es el batido de las claras a punto de nieve, estas también se mezclaran con la salsa, pero es conveniente realizarlo muy poco a poco, con cuidado.
El procedimiento para rellenar los moldes es el siguiente: se llenan en 3/4 partes, se cubren con ramitas de brocolí y se tapa todo con más salsa. Llevaremos los moldes en la bandeja del horno y dejaremos por espacio de 30 a 40 minutos, pero cuando la superficie esté dorada ya podéis apagar para dejar que se acaben de hacer con el calor que queda dentro del horno.
Tiempo de elaboración | 90 minutos Dificultad | Media
Degustación:
El suflé caliente se come nada más acabar la cocción, aunque deberemos esperar un poco para no quemarnos, eso sí... resulta irresistible y no necesita ningún acompañamiento.
Quiero recordar que los quesos sin lactosa Kaiku nos están resultando muy útiles para cocinar platos que nos regalan sabores exquisitos y digestiones ligeras, y un ejemplo de ello son estos San Jacobos rellenos con queso gouda sin lactosa.
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Macarena González es una mamá a la que le gusta meterse en la cocina para elaborar platos clásicos, y también para experimentar con nuevas texturas y sabores. Está convencida de que la comida es fuente de salud, por eso cada día dedica tiempo a escoger los mejores ingredientes con los que preparar alimentos para su familia. Es editora en Peques y Más.
