La gastronomía italiana guarda muchas similitudes con la nuestra, por algo somos dos países mediterráneos y utilizamos muchas veces los mismos ingredientes. Un ejemplo de estas semejanzas es la frittata, un plato que recuerda mucho a nuestra tortilla y que vale la pena descubrir por su delicioso sabor.
La principal diferencia entre una frittata y una tortilla reside en que en lugar de cuajarse los huevos en la sartén, dándoles la vuelta para que se hagan por los dos lados, en la frittata se empieza cuajando los huevos en una sartén, se añade el resto de ingredientes previamente salteados y después se pasa la sartén al horno para gratinarlos.
Nuestra receta de frittata no lleva patatas, sino puré de patatas Maggi, que nos permite conseguir un resultado más cremoso en menos tiempo. El puré Maggi no incorpora ni gluten, ni conservantes ni colorantes, empleando para su elabocación un 99% de patatas de la mejor calidad.
Los mejores ingredientes para hacer frittata
- 115 g (1 bolsa) de puré de patatas Maggi
- 250 ml de leche semidesnatada
- 250 ml de agua
- 1 berenjena
- 1 calabacín
- ¼ de pimiento rojo
- ¼ de pimiento verde
- 1 cebolla
- 1 tomate
- 1 puñado de hojas de albahaca
- 6 huevos
- 5 cucharadas de queso de oveja rallado
- Sal
- Pimienta
- Aceite de oliva
Dificultad
Fácil
Tiempo de preparación
30 minutos
Tiempo de cocción
35 minutos
Cómo se hace la frittata paso a paso
Preparamos las berenjenas
Lavamos la berenjena y la cortamos en rodajas, la ponemos en un colador y la salamos, para que sude y suelte el sabor amargo. Pasados 10 minutos, la enjuagamos bajo el grifo y la secamos. Mientras, preparamos el puré de patatas.
Puré de patatas listo en pocos minutos
Ponemos a calentar la leche con el agua y una pizca de sal en un cazo. Cuando rompa a hervir, retiramos del fuego y añadimos los copos de patata. Dejamos reposar unos instantes y removemos suavemente para obtener un puré de patatas. Reservamos.
Troceamos las hortalizas
Cortamos el calabacín, los pimientos, la berenjena escurrida y el tomate en dados pequeños. Picamos la cebolla y la albahaca.
Cocinamos las hortalizas
Ponemos al fuego una sartén con un poco de aceite de oliva y salteamos la cebolla. Cuando esté transparente, añadimos el resto de los vegetales. Salpimentamos y cocinamos unos 20 minutos aproximadamente.
Mezclamos el relleno de la frittata
En un bol grande batimos los huevos. Retiramos los vegetales del fuego y añadimos el queso rallado, el puré de patatas y la albahaca. Mezclamos con los huevos batidos y rectificamos de sal y pimienta.
Cocemos la frittata
Engrasamos una fuente para horno de forma circular que podamos poner al fuego. Echamos la mezcla en la fuente, la ponemos sobre el fuego y dejamos cuajar la parte inferior durante unos minutos, después ponemos la fuente en el horno a 180ºC y horneamos unos 25 minutos o hasta que la mezcla haya cuajado.
Los mejores trucos y consejos
Usar una sartén antiadherente
Para evitar que los ingredientes se peguen, debemos usar una sartén antiadherente o de acero inoxidable. Antes de echar los ingredientes en la sartén, debemos dejar que se caliente bien el aceite a fuego medio. Hay quien va echando los ingredientes por capas: primero el huevo, después las hortalizas y por último el queso.
Los lácteos son imprescindibles
Leche o queso no pueden faltar en una frittata. Son imprescindibles para conseguir un resultado cremoso, por eso añadir puré de patatas Maggi es una idea estupenda para lograrlo. También sirven para unificar el resto de ingredientes.
¿Aceite o mantequilla?
Como grasa podemos usar aceite de oliva virgen extra o mantequilla, según nuestros gustos personales, pero también podemos mezclar ambos.
Dejar volar la imaginación
Para preparar una frittata podemos usar todo tipo de ingredientes y crear nuestras propias combinaciones. Es el mejor modo de evitar el desperdicio de alimentos y no dejar restos en la nevera.
Las mejores recetas de frittata y sus variantes
Frittata de espaguetis
Una receta muy original de frittata es elaborarla a partir de nuestros espaguetis preferidos, por ejemplo a la carbonara, pesto o boloñesa. Bastará con cuajarlos en el horno con huevo batido.
Frittata de patata, albahaca y queso feta
La preparación es la misma que la receta base, pero usando trocitos de queso feta y hojas frescas de albahaca. Para que resulte más cremosa, podemos usar un poco más de leche a la hora de preparar el puré de patatas.
Frittata de brócoli y cebolleta
La frittata casa muy bien con cualquier con verdura, y el brócoli y la cebolleta no son una excepción. Aromatizados con hierbas frescas, son una combinación deliciosa.
Historia y origen de la frittata
La frittata es una preparación italiana de origen campesino. Surgió de la mezcla de los ingredientes que sobraban del día anterior, o que se tenían disponibles, y, además, solían ser muy económicos, como la pasta, los huevos y la cebolla, de hecho la primera versión es la frittata di cipolle.
Su nombre viene del italiano fritto, puesto que se preparaba en la misma cacerola donde se freían los huevos. Para su preparación, lo mejor es usar una sartén de fondo grueso.
Imágenes: Maggi e iStock/fotocebela